La última sesión de control al Gobierno ha estado marcada por la ‘crisis del pepino’ y por la propuesta de regeneración democrática, que finalmente ha sido rechazada.
El presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, ha defendido que el Gobierno central «ha tratado con equidad, con justicia y reparando daños» a Andalucía, en relación al resto de comunidades autónomas, y ha resuelto «problemas financieros gravísimos que habían quedado enquistados» en anteriores legislaturas.
En su turno de palabra durante la sesión de control al Gobierno celebrada esta mañana en el Parlamento andaluz, Griñán ha insistido en que el Ejecutivo central ha puesto en marcha en los últimos años planes de empleo como el de la Bahía de Cádiz, se han invertido 2.305 millones en los planes E, se han incrementado los salarios y las pensiones mínimas y se ha aprobado la Ley de Dependencia que ha reportado a la comunidad más de 1.000 millones de euros, al tiempo que se han más que duplicado becas a los alumnos andaluces. Se ha referido también al Gobierno actual y su trayectoria a la hora de tratar a la comunidad «con equidad, con justicia y reparando daños», frente a otros anteriores.
El presidente de la Junta ha insistido en que el Ejecutivo nacional ha hecho «muchas cosas buenas para Andalucía y le ha dado un trato equitativo y no distinto al de otras comunidades». Así, Griñán ha opinado que, cuando hay discrepancias entre el Gobierno central y el andaluz, se dicen «públicamente» y la Junta «recurre lo que tenga que recurrir».
Y es que, a su juicio, lo más importante en estos momentos es mantener esa «unidad de todos» para «recuperar el daño y el perjuicio» para «reparar el error y volver a la normalidad». «Tenemos que preservar el bien, nuestra producción agroalimentaria, que es lo que da empleo a los trabajadores», ha defendido.
Arenas: “Zapatero y Griñán han puesto en marcha una catarata de recortes”
Mientras tanto, el presidente del PP andaluz, Javier Arenas, le ha pedido hoy a Griñán que estudie las propuestas de regeneración que le ha remitido esta semana el Partido Popular al presidente de la Junta. «Si hay cosas que están bien vamos a hacerlas juntos», ha dicho el presidente del PP andaluz, quien, tras asegurar que el presidente de la Junta se encuentra «totalmente aislado», ha considerado necesario que «dialogue con todos porque podemos pactar cosas juntos en estos diez meses para ganar la batalla a la crisis».
Para Javier Arenas, Zapatero y Griñán han hecho «exactamente lo contrario» a lo que dijeron en sus discursos de investidura y han puesto en marcha «una catarata de recortes sociales». Recordó que hoy hay 7.000 andaluces afectados por la supresión de ayudas a VPO; miles de empleados públicos a los que se les ha bajado el salario, y 900.000 pensionistas que han visto recortadas sus pensiones. Según el presidente del PP andaluz, ambos presidentes socialistas han puesto en marcha, «una catarata de recortes sociales»
La actitud de Griñán ante Zapatero, ha sido, según Arenas, el «servilismo puro y duro». En teste sentido, ha reprochado al jefe del Ejecutivo que aún no haya demandado al Gobierno de Zapatero un plan de empleo para Andalucía pese a tener 1,2 millones de parados.
El presidente del PP andaluz reclamó a Griñán que gane quien gane dentro de diez meses las próximas elecciones andaluzas se deben aplicar políticas de austeridad y de regeneración democrática, que pasen, entre otras medidas, con la limitación de mandatos, la creación de comisiones de investigación, y de reducción de consejerías. De la misma forma, ha reclamado acabar con la gestión mediante «decretazos», además de acabar con el descontrol del gasto y apostar por la reforma educativa.
Valderas: “Griñán no está para muchos trotes”
Por último, el portavoz de IU LV-CA, Diego Valderas, ha pedido al presidente de la Junta que «se abran las puertas» del Parlamento andaluz al movimiento 15-M y ha criticado que se haya rechazado, por parte de PSOE-A y PP-A, su participación en la comisión parlamentaria en la que se debate la modificación de la Ley de Cajas de Andalucía, a petición de IULV-CA.
El portavoz parlamentario de IULV-CA ha dicho que Griñán «no está para muchos trotes» pero que en los que «le quedan» tiene que girar su política hacia la izquierda «porque la ciudadanía no ha votado mayoritariamente a la derecha». «O cambia el rumbo o la bancada del PP pasará por encima para los próximos 20 años», ha añadido.
Asimismo, ha reclamado al presidente que se comprometa con una reforma de la Ley Electoral de Andalucía, un plan extraordinario de empleo para los ayuntamientos, reformas legales para evitar la corrupción, una banca pública, la regulación de los referéndum, la limitación de mandatos de los cargos al frente de las instituciones y con el hecho de que las comisiones de investigación en el Parlamento puedan aprobarse sin la necesidad de una mayoría.
‘Crisis del pepino’
En la sesión de control al Gobierno, la conocida como ‘crisis del pepino’ ha pasado casi de largo. En cualquier caso, el presidente de la Junta ha hecho en la necesidad de que las voces en la Unión Europea «deben empezar» a ser de la Unión Europea. «Las alertas tiene que darlas la UE, donde están representados los gobiernos nacionales, sobre todo cuando son sanitarias», ha matizado para advertir que de la «cacofonía» que producen demasiadas intervenciones pueden derivarse problemas como los que ha sufrido el sector agroalimentario andaluz. «Hacen falta voces únicas y no dejar que cada cual despierte alarmas, porque eso es muy peligroso», ha insistido Griñán.
El máximo representante del Ejecutivo autonómico ha confiado en que se resuelva con prontitud la crisis sanitaria que aún no está cerrada y ha pedido que no se caiga en la «germanofobia». En ese sentido, ha recordado que Alemania es un país con el que «siempre hemos mantenido muy buenas relaciones» y con el que Andalucía tiene relaciones comerciales. «Son nuestros mayores compradores y tenemos que volver a la normalidad», ha concluido.
Por su parte, el Partido Popular de Andalucía ha reclamado que las ayudas que reciba el sector hortofrutícola por el daño causado compensen «el 100 por cien de las pérdidas», y que para ello se use el remanente de los 2.500 millones de la PAC.
En una comparecencia de la consejera de Agricultura para explicar las acciones llevadas a cabo por el gobierno andaluz, la portavoz del Grupo Popular, Esperanza Oña, reprochó a la consejera del ramo, Clara Aguilera, que hayan reaccionado con «lentitud», y que no hayan acompañado la «política de gestos» de una buena «política de gestión».
Además, denunció que no se hayan exigido responsabilidades judiciales, «ni civiles ni penales», y que no se haya creado una Mesa Permanente, como ha pedido el sector, para el que pidió un apoyo expreso y «sin titubeos». En este sentido, dijo que el sector hortofrutícola «ha pagado en solitario» el daño, ayudado por la «debilidad» del Gobierno de la Nación, quien, a su juicio, «no ha sido diligente».
Además, recordó que en estos momentos se echa en falta la existencia de un «ministerio de Agricultura», cuya supresión ha criticado duramente el Partido Popular.
Unanimidad para exigir respuestas a la UE
Por lo demás, el Pleno del Parlamento ha aprobado esta mañana por unanimidad una proposición no de Ley del Grupo Socialista por la que se insta a la Junta de Andalucía a que proporcione al sector hortofrutícola del pepino el asesoramiento y apoyo jurídico que precise para reclamar antes las instancias oportunas compensaciones por los daños causados.
También se han aprobado cinco puntos de una segunda proposición no de Ley, en este caso del Grupo Popular, en la que, entre otros aspectos, se pide que la Junta inste al Gobierno central a poner en marcha una campaña de promoción, especialmente en los paises afectados por la crisis alimentaria y en España para restablecer la imagen y el prestigio de los productos hortofrutícolas andaluces.
Del mismo modo, resultó aprobada otra proposición no de Ley del Grupo parlamentario Socialista, en este caso relativa al fortalecimiento del nuevo modelo local, que contó con el apoyo total de IULV-CA y parcial del Grupo Popular.
Por el contrario, resultó rechazada una proposición del Grupo Popular relativa a regeneración democrática y de recuperación económica y que, en otras medidas, incluía instar al Gobierno andaluz a promover los cambios normativos necesarios para limitar el mandato como presidente de la Junta a ocho años. También resultó rechazada una moción del mismo Grupo relativa a política general en materia de comunicación social.