Ecologistas en Acción ha criticado la actuación de la compañía Minas-Las Cruces afirmando que los trabajos suponen la pérdida de «más de 5.000 metros cúbicos de agua al día».
Sevilla Actualidad. Ecologistas en Acción ha criticado los trabajos que desarrolla la compañía Cobre-Las Cruces afirmando que suponen la pérdida de «más de 5.000 metros cúbicos de agua al día», así como ha asegurado que «se están produciendo vertidos contaminantes que llegan al río Guadalquivir».
Según Ecologistas en Acción, desde que la compañía retomó su actividad en julio de 2009 y puso en marcha el nuevo sistema de explotación el acuífero Niebla-Posadas, sobre el que se asienta la mina estaría perdiendo grandísimas cantidades de agua.
Asímismo, la Junta de Andalucía ha abierto un expediente sancionador a la compañía por incumplir una de las condiciones estipuladas en la concesión que se le otorgó a Cobre-Las Cruces para reactivar los trabajos de extracción en julio de 2009 relativa a la obligación de compensar las pérdidas de agua del acuífero con la compra de derechos del agua.
Además, a la compañía Cobre-Las Cruces ya se le ha sido llamada la atención varias veces, ya que la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) paralizó por orden judicial la actividad de Cobre-Las Cruces en mayo de 2008 tras detectar 20 perforaciones no autorizadas.
Es por ello que Ecologistas en Acción critican estas actuaciones llevadas a cabo y sostienen que «están destrozando la reserva de agua potable del área metropolitana de Sevilla».
Revisión de la autorización
Los ecologistas también recordaron que ya en diciembre de 2009, el Defensor del Pueblo Andaluz, José Chamizo, recomendó a la la Agencia Andaluza del Agua revisar de oficio la autorización de las obras, instalaciones y actividades de operación del sistema de drenaje-reinyección de Cobre-Las Cruces con motivo del Plan Global de Minas Las Cruces, para comprobar si las modificaciones incluidas en la nueva concesión suponían cambios sustanciales de la autorización.
Chamizo reclamó a la Administración someter el proyecto de modificación del sistema de drenaje-reinyección a un nuevo procedimiento de prevención ambiental, al entender que con la nueva autorización se producía un «incremento» en la utilización de los recursos naturales y en los vertidos inicialmente previstos.