El expolicía local Manuel Lebrón natural de Alcalá de Guadaíra detenido por retener a sus dos hijos ha pasado a disposición judicial en la mañana del jueves en el juzgado de Dos Hermanas, después de que la puesta a disposición se retrasase del miércoles al jueves, tras declarar su expareja. A Lebrón se le acusa de un delito de sustracción de menores, atentado contra la autoridad y lesiones.

La madre de los dos hijos declaró en la Jefatura Superior de Policía en la mañana del miércoles, prestando declaración sobre la denuncia que presentó después de que el padre no entregara a los niños en Granada el pasado 30 de diciembre como se había establecido, así como sobre las denuncias previas por malos tratos contra este. Lebrón tiene una condena firme de 34 meses de prisión pendiente de ser ejecutada, además de una orden de alejamiento.

La detención de Lebrón en su domicilio de Dos Hermanas con la presencia de los niños, en los que llegó a escudarse, dejó a tres policías heridos. Según un portavoz de la Policía Nacional, el detenido estaba “bastante agresivo” en el momento de la detención. Ésta se produjo en el domicilio de su actual pareja en Dos Hermanas. Tras localizar al detenido, este “en un primer momento” llegó a “parapetarse” tras sus hijos, por lo que los policías procedieron en primer lugar a “poner a salvo a los menores”, de forma que estos no sufrieron “ningún daño”. Una vez los niños estaban a salvo, el detenido blandió un cuchillo de “grandes” dimensiones con el que llegó a agredir y herir a tres policías, que fueron trasladados al Hospital Virgen del Rocío. Los niños fueron localizados en buen estado y entregados a su madre en la sede de la Jefatura Superior de Policía de Sevilla.

Lebrón cuenta con siete detenciones previas practicadas por la Policía Nacional y otra de la Guardia Civil, además de una orden de alejamiento de un vecino de Alcalá de Guadaíra cuyo quebranto le causó otro arresto. En su perfil de Facebook en su publicación más reciente critica  la Ley de Violencia de Género, que ha llegado a calificar de «una auténtica aberración». «La ideología de género instaurada por las feminazis en España, instigadas por los institutos de la mujer y la equiescencia de políticos, y la colaboración de la judicatura hacen, q la tiza pinte padres, pero en definitiva es lo mismo. Escupo la ideología de género, vuestra futuras reformas, y lo hago con la mayor ley existen, la Divina.», reza la publicación.