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Borge considera que la denuncia de CCOO le ha supuesto un “juicio público paralelo” y “un calvario personal”.

La portavoz del equipo de Gobierno de Alcalá de Guadaíra, María José Borge, se ha mostrado “satisfecha” por la sentencia absolutoria del Juzgado de lo Penal Número 14 de Sevilla ante la denuncia por prevaricación interpuesta por el sindicato CCOO.

Borge ha expresado su “tranquilidad” ante la sentencia, así como su “pesar” por una “denuncia desmesurada que ha supuesto un juicio público paralelo, injusto e inquisitorial”.

La portavoz municipal ha asegurado que “siempre he tenido la conciencia tranquila por mi actuación y confiaba en que así lo demostrara la Justicia como finalmente ha sido”.

Borge ha reconocido que ha vivido “momentos duros” no por ella, ante la seguridad de la legalidad de su actuación, sino por “la presión a la que he sido sometida social y políticamente ante mi familia y los seres queridos que me rodean”.

La edil recuerda que “en política no todo vale” y que “en los cinco años transcurridos desde la denuncia hasta mi absolución llevo vivido un calvario acompañada por mis familiares y amigos, aunque no deseo el mismo mal para las personas que me acusaron porque no me han educado en el odio y el rencor”.

La portavoz concluye que ha estado “sufriendo acusaciones injustas de irregularidades por parte de partidos políticos y sindicatos que finalmente se desvanecen ante las pruebas evidentes de que en el Ayuntamiento alcalareño los procesos gozan de toda legalidad”.

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