En él los sindicatos revisan críticamente los distintos puntos del Estudio de Viabilidad, como del Pliego técnico-administrativo para la privatización de la piscina municipal de Alcalá de Guadaíra. Así las secciones sindicales con representación en el Ayuntamiento siguen afirmando que la privatización saldrá “más cara” a los alcalareños y los servicios de la misma “bajarán de calidad”.

Sevilla Actualidad. Las secciones sindicales de UGT y CC.OO en Alcalá de Guadaíra han pasado de las protestas a voz alzada al ataque directo a la alcaldía, en cuanto a la privatización de la piscina municipal Los Alcores.

Así, a partir del Estudio de Viabilidad y el Pliego técnico-administrativo para llevar a cabo la privatización, los sindicatos han elaborado un extenso documento en el que demuestran “la pérdida de calidad y de eficiencia económica” de los servicios de la misma.

En dicho Pliego se determina la adjudicación a una sola empresa, tanto de servicios que ya estaban externalizados, como  de otros que hasta ahora estaban a cargo del Ayuntamiento. Esto es, los de salvamento y socorrismo, cursos y programas deportivos, y coordinación de los distintos servicios. Para los sindicatos, esto “completa” la privatización de la piscina municipal.

El Estudio de Viablidad señala que la privatización busca objetivos como  la “mayor calidad y amplitud de los servicios” o la “eficiencia económica de la instalación”. Sin embargo, el mismo no menciona el procedimiento con el que se llevarán a cabo concretamente las promesas resultantes.

Sevilla Actualidad les ofrece la posibilidad de conocer el informe de los sindicatos al completo, haciendo clic aquí. Pasamos a otros puntos que pueden provocar controversias  en la futura gestión privada de la piscina:

1º. El Estudio reseña el desconocimiento por parte del Ayuntamiento tanto del número de usuarios totales, como de los costes e ingresos anuales de la piscina. Por ello, el firmante del mismo recomienda la subcontratación de los servicios “a una empresa especializada”. A fin de poder “determinar con exactitud cuáles son los resultados de explotación de la piscina, el resto de costes de mantenimiento de la instalación y los ingresos por prestación de servicios”.

Esto, para los sindicatos significa que la externalización se convierte en un “acto de fe”, puesto que hay un deficiencia reconocida de información que requiere “el establecimiento de los mecanismos necesarios para conocer los datos de ingresos y gastos” de la piscina, antes de estudiar la rentabilidad económica de la misma.

2º. Con respecto al personal, el estudio considera “sobreestimado” el número de profesionales de la piscina. Estimaciones hechas a partir de “fuentes consultadas” que no se nombran en el informe, y a las que se añaden la colaboración de “empresas especializadas en el sector, interesadas en la prestación de servicios de la instalación”.

Así, las citadas “fuentes” ven necesario la reducción del número de monitores de 8 a 4,5, aumentando su jornada de 35 a 40 horas semanales. Lo que suponen 5.640 horas menos en la prestación de servicio a los usuarios. Además estos tendrán que cumplir varias tareas al mismo tiempo, por lo que se incumplirá el Decreto 23/1999.

Otro incumplimiento será el del Convenio Estatal para Instalaciones Deportivas y Gimnasios, que estima un máximo de 1.776 horas anuales por monitor. Pero con la reducción de estos, los horarios aumentarán hasta 1.880.

3º. Con respecto al servicio de limpieza, el Pliego estipula un descenso de horas semanales de 80 a 40, por parte de los empleados de Nettosol –empresa externa encargada del servicio actualmente-. El personal verá así reducido su horario y salarios a la mitad, para realizar su labor “preferentemente fuera del horario de apertura al público”, Mientras que los sindicatos aseguran que esto no es más que un descenso de la calidad del servicio, puesto que “la máxima necesidad de limpieza se produce precisamente en los cambios de entrada y salida de grupos”.

4º. Para controlar el acceso, el personal del servicio aumentará 5 horas semanales con la nueva subcontrata. Incumpliéndose de nuevo el convenio. Además el coste aumentará a 37.862,40 euros en lugar de las actuales 16.494,00 euros. Sin embargo, el servicio requiere de 80 horas semanales, por lo que las 40 restantes correrán a cargo del “personal del Servicio Municipal de Deportes”.

5º. El servicio de mantenimiento de la instalación no consta en el Pliego Técnico como servicio realizado en la piscina. Sin embargo el anterior pliego remarca la existencia de dos técnicos de mantenimiento que ahora “desaparecen en combate”.  Por su parte, con el nuevo contrato se estima una reducción del coste del servicio de 53.200 euros anuales a 18.931,20 –un 64,41% menos-. Aunque no se establece el número de empleados que tendrá el mismo.

Por lo que, los sindicatos creen que: o el Ayuntamiento lleva años «haciendo el tonto», pagando más del doble de lo que realmente cuesta este servicio, o” los recursos económicos y humanos que ahora destinamos a este servicio sólo pueden ser calificados de baja temeraria”.

6º. Por último, el Estudio para la privatización, ve necesario la creación de un nuevo servicio para coordinar el resto de tareas en la piscina. Lo que supondrá un coste adicional de 22.272,00 euros anuales. Además, las tareas que se le atribuyen, en las escasas 20 horas semanales, son dignas, como anuncia el informe de los sindicatos de “un superman”.

Con todas propuestas y datos, los sindicatos llegan a conclusiones negativas , con respecto a la privatización del actual servicio público. Así, consideran que para poder realizar todo el proyecto de la externalización de los servicios, el Ayuntamiento lleva una lógica de reducir “todo a la mitad”, incluyendo  con ello “la calidad de los servicios que hoy se prestan”.

Por otro lado, la falta de datos reales sobre el números de usuarios, solucionadas con la subcontratación de los servicios  y no de un estudio pormenorizado de los mismos, hará que “con los años crezca también las cuantías económicas que tendremos que desembolsar los alcalareños”.

Por último los sindicatos reiteran que el Ayuntamiento renuncia con este proyecto a ofrecer una alternativa necesaria,  al alcance de todos, “eficiente funcional y económicamente”. Que sirva de verdad a los alcalareños que necesitan “aprender a nadar, realizar cursos, la práctica de la natación terapéutica…”, y que no tienen la capacidad adquisitiva suficiente para apuntarse a un club privado, “negándoles el acceso a este bien social”.

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