Los sindicatos anuncian una concentración el próximo viernes a las 11:30 horas en el patio del Ayuntamiento.
En un informe de fiscalización de la nómina de junio de 2018, el interventor alertó de la necesidad de subsanar a partir del 1 de julio de 2018 de una serie de deficiencias detectadas en la nómina. Al no producirse dicha subsanación, según fuentes del municipales, el Ayuntamiento ha suspendido parte de la nómina, principalmente productividad y trienios, sin que ellos afecte al salario base de los trabajadores municipales. Esta situación ha provocado un malestar generalizado en la plantilla, que ya ha anunciando una concentración para el próximo viernes a las 11:30 horas en el patio del Consistorio, convocada por los sindicatos SEM, UGT, USO, Sppme, Csif, CCOO y SIBA.
Así, los técnicos municipales de Intervención, Secretaría y Recursos Humanos han mantenido varias reuniones para regularizar los conceptos donde han detectado las irregularidades, principalmente en la productividad y los trienios, para evitar el reparo de Intervención y la paralización del pago de la nómina.
La solución propuesta, según el Ayuntamiento, «permite pagar la nómina y supone la aprobación de un Sistema de Evaluación del Desempeño para el cálculo de la productividad, respetándose el límite de la cuantía global de productividad fijada en el presupuesto municipal, y la modificación de varios artículos del Reglamento y del Convenio Colectivo, para evitar la duplicidad de reglamentación».
Esta propuesta técnica fue llevada a la Mesa General de Negociación para su debate entre los sindicatos y la Corporación, realizándose cambios, a propuesta de los sindicatos que han sido incorporados en el acuerdo firmado por las partes el pasado 19 de julio, siendo ahora necesario someter de nuevo a la consideración de los servicios técnicos y de la intervención, el acuerdo alcanzado, ya que son preceptivos los informes de ambos, antes de su ratificación por los órganos.
Según miembros de la Corporación y representantes sindicales consultados por La Voz de Alcalá, «la modificación del Reglamento y del Convenio Colectivo tiene que aprobarse en Pleno». En este sentido, han explicado que «el gobierno llevó la propuesta a los grupos de la oposición media hora antes de iniciarse el Pleno ordinario de julio, el pasado jueves 19, justo después de alcanzar el acuerdo en la Mesa de Negociación». La falta de tiempo para estudiarlo propició que los grupos se negaran a incluirlo en el Pleno y solicitaron tiempo». Así, el gobierno tendrá que convocar un Pleno extraordinario para su aprobación definitiva.
El Gobierno, según una circular dirigida a los trabajadores, «ha dado instrucciones al Servicio de Recursos Humanos para que se elabore una nómina inicial que no incluya los conceptos objeto de subsanación y posible reparo, al objeto de no paralizar la nómina del mes de julio». Por otro lado, han informado de que «se están realizando los trabajos técnicos oportunos para incluir en la nómina los conceptos que pudieran causar reparos, los cuales se esperan puedan incorporarse en la siguiente nómina, una vez realizados todos los informes exigibles dentro de la legalidad».