El Ayuntamiento de Sevilla, a través de la empresa municipal de limpieza Lipasam, ha puesto en marcha un amplio plan especial para intensificar la limpieza en las calles de la ciudad, realizando 121 nuevas contrataciones para labores de desbroce de malas hierbas, retirada de maleza, recogida de naranjas caídas al suelo y refuerzo de la recogida selectiva de residuos.
Como ya ocurriera en los dos últimos años, el Consistorio ha decidido adelantar las tareas de desbroce, ante la proliferación acelerada de vegetación provocada por las lluvias recientes y las jornadas de sol. Para ello, Lipasam ha sumado 57 nuevos operarios, que se encargarán de reforzar los trabajos mecánicos y manuales en acerados, medianas, parterres, bulevares, terrizos y plazas de toda la ciudad.
Paralelamente, ha comenzado la campaña de retirada de la naranja amarga, que empieza a desprenderse de los árboles y a caer a la vía pública. Este año, el servicio se apoyará en 45 trabajadores adicionales para evitar el rápido ensuciamiento de calles y aceras debido al aplastamiento de los frutos. Estas labores se están coordinando con el Servicio Municipal de Parques y Jardines y con los distintos distritos.
La tercera línea del plan se centra en la recogida selectiva de residuos, un servicio que se ve especialmente tensionado en estas fechas por el incremento estacional de desechos. Gracias a la llegada de nuevos vehículos y al refuerzo de personal, con 19 contrataciones más, Lipasam está aumentando la frecuencia de vaciado de los contenedores destinados a las diferentes fracciones.
El alcalde de Sevilla, José Luis Sanz, destacó que estas medidas responden a la voluntad municipal de mantener la ciudad «más limpia y cuidada», con recursos adicionales y planes especiales adaptados a cada época del año.
Con este dispositivo, Lipasam busca «mejorar la imagen y el estado de los espacios públicos», reforzando sus servicios y modernizando sus prestaciones con el objetivo de avanzar hacia «una Sevilla más limpia y sostenible».