La presidenta de la asociación Amama, Ángela Claverol, ha cifrado en unas 3.000 mujeres las afectadas por el error en los cribados de cáncer de mama del Servicio Andaluz de Salud (SAS). En una entrevista concedida a Sevilla Actualidad, Claverol asegura que desde que se destapó el fallo, la asociación se ha convertido en «un teléfono de la esperanza para tantísimas mujeres», recibiendo miles de llamadas y correos de pacientes preocupadas por su diagnóstico.
«Solo del cribado hemos tenido unas 3000 y pico llamadas. Ha sido una locura», explica Claverol, que reconoce estar «física y emocionalmente cansada» por la magnitud del problema y la falta de respuestas por parte de la Administración. Actualmente, Amama sigue atendiendo una media de 10 a 15 llamadas y hasta 60 correos electrónicos al día, muchas de mujeres que se encuentran «llorando, preocupadas o terriblemente angustiadas».
La presidenta de la asociación confirma además que ya se han presentado 220 demandas judiciales relacionadas con el retraso en los diagnósticos, y advierte de que el número «sigue creciendo». «No son 220 papeles, son 220 vidas destrozadas por el cribado de cáncer de mama», lamenta.
Manifestación 9 de noviembre
Amama, que lidera la federación andaluza de asociaciones de mujeres con cáncer de mama, apoya la manifestación convocada por las Mareas Blancas para el 9 de noviembre, que Claverol considera «una de las mayores concentraciones que se verán en Andalucía».
La asociación insiste en que no permitirá que el caso se cierre en falso: «A las mujeres andaluzas nos han tratado con desprecio, y a una mujer nunca se le olvida cuando la tratas con desprecio».