El Ayuntamiento de Sevilla ha reabierto este fin de semana los parques del Tamarguillo y Miraflores, después de aplicar en ellos las medidas establecidas en el protocolo frente a la gripe aviar, siguiendo las indicaciones de la Junta de Andalucía. Esta decisión se suma a la reciente reapertura del Parque de María Luisa, que permaneció cerrado temporalmente por la misma causa.
En este último recinto, pese a la aparición de cuatro aves muertas en las últimas horas, se mantiene la apertura. El Consistorio ha explicado que se ha procedido al balizamiento de las lagunas, además de a la limpieza y desinfección de los estanques, el refuerzo de la vigilancia, el vallado de las zonas sensibles, el control en la recogida de aves y la instalación de cartelería informativa con recomendaciones para los visitantes.
El protocolo se activó tras detectarse la presencia de animales fallecidos en varios espacios de la ciudad. En el Parque de María Luisa se hallaron a comienzos de semana cinco patos y un cisne muertos, mientras que en los jardines del Real Alcázar, también ya reabiertos, se localizaron los cadáveres de un pato y un pavo real, además de otros tres pavos encontrados en el patio de una guardería colindante al recinto monumental.
Con estas actuaciones, el Ayuntamiento busca compatibilizar la seguridad ciudadana y ambiental con la normalidad en el uso de los parques públicos, manteniendo un seguimiento constante de la situación y aplicando las recomendaciones de las autoridades sanitarias.
La reapertura de los parques supone recuperar para la ciudadanía importantes espacios de ocio y esparcimiento, aunque con medidas de prevención que se mantendrán mientras persista la alerta por gripe aviar en la capital.
