En la capital hispalense no hay playa, pero sí rincones donde combatir el calor sin salir de la ciudad. Uno de ellos es el pub OCCO Pool Club, un espacio que combina ocio nocturno y piscina, y que en los últimos años se ha hecho un hueco en la oferta de ocio veraniego de la Sevilla.

Ubicado a pocos minutos del centro, el lugar cuenta con más de 4.000 metros cuadrados de terraza y una piscina de agua salada, pensada para quienes buscan refrescarse y pasar el día en un ambiente cuidado. Por las mañanas, las tumbonas y camas balinesas invitan a relajarse, mientras que la música en directo o los DJs marcan el ritmo de la jornada.

Al caer la tarde, el espacio cambia de registro y adopta un carácter más festivo, con iluminación, actuaciones y sesiones que prolongan la actividad hasta la noche. La oferta gastronómica, con platos y bebidas de inspiración internacional, acompaña tanto a quienes buscan pasar unas horas como a quienes alargan la visita.

Aunque su estética y servicios remiten a los beach clubs mediterráneos, OCCO mantiene un toque local en su ambiente y clientela. Eso sí, su carácter selecto también se refleja en los precios, lo que lo convierte en una opción más habitual para planes puntuales que para el día a día.