Eva Casanueva, madre de Marta del Castillo, ha compartido su dolor y sus sentimientos más profundos en una entrevista en el programa de Mitele, Madres, Voces desde el alma, conducido por Cruz Sánchez de Lara. En un acto de valentía y sinceridad, Casanueva ha rememorado los momentos más difíciles de su vida tras la desaparición de su hija, y cómo ha intentado seguir adelante por el bienestar de sus otras hijas.
Recuerda especialmente la primera vez que se sentaron a cenar sin su hija Marta, una experiencia que aún la marca profundamente. «Recuerdo mucho la primera noche que nos sentamos a cenar y ya no éramos cinco. Eso es algo que se me quedó. Intentando pues seguir adelante. Intentar que a ella no le afectara verme llorar. Entonces yo siempre he intentado cuando estaba sola llorar y ellas no eran tontas me decían «mamá, ¿estás triste?» Yo les decía «bueno, estoy triste porque están buscando a la hermana, pero tenéis que ir al colegio, tenéis que seguir estudiando» », relató Casanueva.
A pesar de que su vida cambió completamente desde entonces, Eva habla de un «chispazo» que la hizo salir de la cama, un momento crucial que le permitió seguir adelante por sus hijas. «Cuando Marta se fue, había una con 11 y otra con 13 años. Eran dos niñas. Tenía que criarlas, no quería que me echaran en cara que no las tuve en cuenta porque solo tenía vida para Marta. Recuerdo que estuve mes y medio metida en la cama sedada, pero llegó un momento que mi marido me dijo: «Eva, tienes que salir de la cama porque tienes dos hijas más».
A lo largo de la entrevista, la madre de Marta fue preguntada sobre si, sabiendo lo que la vida le deparaba, habría repetido la experiencia de ser madre de su hija. Con firmeza, Eva respondió: «Por supuesto que sí, porque nadie me va a quitar esos 17 años con mi hija, en los que ella nos hizo muy felices y nosotros le hicimos muy feliz a ella». Para Casanueva, esos años de vida junto a Marta fueron irremplazables, aunque también reflexionó sobre el dolor que esta tragedia le ha dejado. «Sí que es verdad que si volviéramos a revivir sabiendo lo que sabemos, cuántas veces nos hemos imaginado ese momento de si supiéramos lo que nos deparaba la vida, ¿qué hubiéramos cambiado? ¿Qué hubiera cambiado de decirle a mi hija: «Marta, no salgas con tus amigos, vente a ver a tu tío que le han operado de la rodilla. Vente con nosotros…». «No puedes evitar el destino, no puedes evitar que hubiera conocido a Miguel Carcaño, no lo sé…». «Pero, por supuesto, pasaría por lo mismo, pasaría por tener a Marta como hija, aunque la perdiera con 17 años».
Eva Casanueva también compartió cómo, al convertirse en abuela, ha llegado a comprender el sufrimiento de su propia madre. «Cuando yo he sido abuela, me he dado cuenta de lo que tuvo que sufrir mi madre», confesó. «Ahora sí entiendo el dolor de mi madre, aunque nunca lo dijo», añadió, explicando cómo comenzó a cantar canciones infantiles a su nieta, algo que la hizo revivir emociones, pero de una manera distinta: «No las cantas igual», afirmó.
Finalmente, la madre de Marta también se mostró rotunda en sus declaraciones sobre la esposa de Francisco Javier Delgado, uno de los implicados en el caso de su hija. «Yo no he podido perdonar a la mujer de Francisco Javier Delgado, que siendo madre le dio coartada al marido. ¿Cómo esa señora puede darle un beso de buenas noches a su hija todos los días?», expresó, visiblemente afectada.