Uno de los relojes de sol de la Iglesia de la Magdalena. David Cejudo.

Los relojes de sol forman parte del patrimonio histórico y cultural de Sevilla, aunque en muchas ocasiones pasan desapercibidos para los viandantes. La ciudad cuenta con más de veinte relojes solares distribuidos en diferentes enclaves, desde catedrales y conventos hasta parques y edificios civiles. Estos vestigios del pasado, que fueron fundamentales en la medición del tiempo antes de la llegada de los relojes mecánicos, siguen marcando la historia de la ciudad.

Los relojes de sol más antiguos y representativos

Uno de los lugares con mayor concentración de relojes de sol en Sevilla es la Catedral de Sevilla, que alberga siete relojes solares, seis de ellos verticales y uno horizontal en la cubierta. Su presencia destaca el valor astronómico que estos dispositivos tuvieron en la Edad Media y el Renacimiento.

El Museo de Bellas Artes, ubicado en el antiguo Convento de la Merced, conserva un reloj de sol vertical declinante en su Claustro Mayor, que servía a la comunidad religiosa para marcar las horas de oración.

En el Hospital de la Santa Caridad, concretamente en el Patio de los Rosales, se encuentra un reloj solar de numeración romana, aunque las líneas horarias se han ido desgastando con el tiempo.

Otro de los puntos donde aún pueden observarse relojes solares es el Monasterio de Santa María de las Cuevas (La Cartuja), donde se conservan tres relojes solares en diferentes partes del recinto, en clara alusión a la importancia de la medición del tiempo en la vida monacal.

En la Iglesia de San Lorenzo, en su fachada meridional, se encuentra un reloj de sol rectangular con numeración arábiga. De características similares es el de la Iglesia de Omnium Sanctorum, que, aunque ha perdido parte de su diseño original, sigue siendo visible en uno de sus muros laterales.

En la Capilla de San José, ubicada en la calle Jovellanos, destaca un reloj de sol con numeración romana, datado en 1680, un ejemplo de la presencia de estos dispositivos en edificios religiosos de la ciudad.

Relojes de sol en la arquitectura civil y espacios públicos

Más allá de los templos y conventos, Sevilla cuenta con relojes solares en lugares inesperados. En la Casa de los Guardiola, situada en la Puerta de Jerez, se puede observar un reloj de sol pintado en su fachada, con la figura de un ángel que sostiene dos velas y una paleta con pinceles.

El Parque de María Luisa alberga otro de los relojes solares más emblemáticos de la ciudad, situado en la Plaza de América. Se trata de un reloj de sol horizontal circular, decorado con azulejos sevillanos y construido con motivo de la Exposición Iberoamericana de 1929.

Otros relojes de sol se pueden encontrar en el Convento de los Remedios, cerca de la Plaza de Cuba, así como en la Iglesia de la Magdalena, donde se combina con una espadaña en la fachada.

El Centro Comercial Zona Este alberga el reloj de sol más moderno y de mayor tamaño de Sevilla. Se trata de un reloj solar horizontal monumental de aproximadamente 10 x 14 metros, que adorna la plaza central del recinto y representa una reinterpretación contemporánea de estos antiguos dispositivos.

Relojes de sol ocultos en la ciudad

Algunos relojes solares están integrados en edificaciones privadas o pasan desapercibidos en el entramado urbano. En la calle Leviés, número 17, se restauró en 2007 un reloj de sol en un patio interior. De forma similar, en la calle Marqués de Paradas, cerca de la antigua Estación de Córdoba, se encuentra otro reloj de sol en la fachada de un edificio de viviendas.

En la Iglesia de San José, entre las calles Tetuán y Sierpes, hay un reloj de sol en el muro meridional, cuya sombra solía indicar la hora en la transitada calle Jovellanos.