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La XXIII Bienal de Flamenco de Sevilla ha cerrado sus puertas con un rotundo éxito, consolidándose como «la mejor edición de la historia del evento». En cifras, en esta edición ha habido más de 39,900 espectadores y se han recaudado 1.008.701 euros en la venta de entradas.
Bajo el título «Ole de nuevo», este año, se han presentado 64 espectáculos, de los cuales 39 agotaron sus localidades. Con una ocupación media superior al 90%, la Bienal ha atraído a más de 100,000 personas a actividades paralelas bajo el título «Otros Oles».
Uno de los aspectos más destacados de esta edición ha sido la presentación de 17 estrenos absolutos, lo que ha permitido a los artistas mostrar su creatividad en diez espacios escénicos de la ciudad. La Bienal ha ofrecido una mezcla única de tradición e innovación, con 30 citas exclusivas que han capturado la atención de programadores internacionales.
Con respecto al impacto turístico, un estudio reciente revela que 9286 visitantes viajaron a Sevilla específicamente para asistir al evento. De ellos, el 54.3% son residentes locales, mientras que el 32.3% son turistas que eligieron Sevilla para pernoctar en Andalucía. Estos visitantes disfrutan de una estancia media de seis noches, con un gasto diario promedio de 126 euros, superior al gasto medio de los turistas en la región.
El 60% de los turistas que asistieron a la Bienal son nacionales, con una destacada presencia de andaluces y madrileños, mientras que el 40% son internacionales, principalmente de Francia y Alemania. Además, el 63.5% de los encuestados manifestaron su intención de volver a Sevilla, lo que subraya el atractivo duradero del evento.
Las actividades paralelas, que comenzaron el 3 de septiembre, enriquecieron la experiencia de más de 100,000 personas con cine, literatura y música en vivo. El ciclo «Flamenco a Pie de Calle» ofreció actuaciones gratuitas en diversas localizaciones, lo que permitió a la comunidad disfrutar de la cultura flamenca de manera accesible.
