Un abuelo ha sido condenado a cinco años de prisión por realizar tocamientos a su nieta, menor de edad, durante seis años en Sevilla. La niña, que tenía siete años cuando comenzaron los abusos, los sufrió hasta los 13. La nieta era nacida del matrimonio entre su hijo y su nuera, quienes se separaron en 2010. Desde entonces, el padre contaba con un régimen ordinario de visitas, si bien la custodia pertenecía a la madre. Por ello, era habitual que pernoctase en el domicilio de los abuelos paternos.
La sentencia dictada por el Tribunal Superior de Justicia Andaluz, «aprovechando dichas estancias, desde que la niña tenía aproximadamente seis o siete años de edad y por un espacio temporal de unos cinco o seis años; es decir, hasta que la nieta alcanzó los 12 o 13 años, su abuelo le hizo tocamientos en pechos y pubis, tanto por encima como por debajo de la ropa». Estas circunstancias, «tuvieron lugar en los momentos en que su mujer, bien por ir a la compra, bien por estar dedicada a sus quehaceres, los dejaba solos. Asimismo, en tres o cuatro ocasiones, en la terraza o azotea de la vivienda, se masturbó delante de la menor y alguna vez le hizo masturbarlo», relata la sentencia. Todo ello, provocó en la menor una «una situación de victimización sexual que afectó igualmente a otras parcelas de su vida cotidiana, como su rendimiento escolar», apunta.
Cinco años de prisión
Por ello, y tras rechazar el recurso de apelación interpuesto por la defensa del acusado, el TSJA ratifica la sentencia y condena a este hombre a cinco años de prisión, así como a ocho años sin poder acercarse a menos de 300 metros de su nieta. Asimismo, se le impone la medida de libertad vigilada tras el cumplimiento de la pena por un periodo de ocho años y la pena de inhabilitación especial para el ejercicio de cualquier profesión que tenga contacto con menores por el mismo plazo. Además, deberá pagar una indemnización a la menor de 15.000 euros.