Taxis / TS

Agentes de la Policía Nacional han detenido a dos varones de 25 y 16 años de edad, por la comisión de un robo con violencia cometido a un taxista, al que agredieron para conseguir sustraerle dos teléfonos móviles en el transcurso de una “carrera”. Los ahora detenidos subieron al taxi y solicitaron al conductor que les llevase a un punto de la capital, para a mitad de camino cambiar de parecer y pedir que les llevara a la barriada de las Tres Mil Viviendas. Una vez allí, mientras uno distraía al taxista el otro sustraía los efectos y no dudaron en utilizar la violencia para hacerse con el botín.

Utilizaban la violencia para hacerse con el botín

La investigación se inició a mitad del mes de septiembre, cuando un taxista, en el transcurso de una “carrera”, fue víctima de un robo con violencia por parte de dos individuos, que llegaron a agredirle con la finalidad de sustraerle dos teléfonos móviles.

La víctima solicitó ayuda de la Policía Nacional a través de una llamada a la sala operativa del 091, por lo que se personaron rápidamente en el lugar un indicativo policial.

Gracias a las manifestaciones de la víctima, que pudo aportar una descripción de los autores y a la rápida intervención policial, los agentes tras dar varias batidas por la zona y diversas diligencias, localizaron a los dos presuntos autores que fueron identificados y detenidos por un delito de robo con violencia.

Contaron con la ayuda de una tercera persona

Los agentes pudieron comprobar que este no era un hecho aislado, ya que se habían producido otro  suceso delictivo de características similares. En este nuevo caso, un cliente subió a un taxi y cuando llegó al trayecto solicitado, huyó del mismo sin abonar la “carrera” y llevándose consigo el terminal móvil del taxista. Las pesquisas policiales determinaron que el autor de los hechos coincidía con uno de los dos detenidos. Además los investigadores pudieron concretar que los ahora detenidos contaron con la presunta colaboración de una tercera persona, otro menor de edad.

Los detenidos ya pasaron a disposición de la Autoridad Judicial y a la Fiscalía de Menores, en el marco de una investigación y operativo policial llevado  a cabo por la Comisaría de Distrito Sur de Sevilla.