La situación de la Atención Primaria en la provincia de Sevilla ha llegado a un punto crítico. Según los últimos informes oficiales del Servicio Andaluz de Salud (SAS), el número de Zonas Básicas de Salud (ZBS) clasificadas como puestos de difícil cobertura (PDC) se ha incrementado de manera alarmante. En años anteriores, estas zonas representaban el 25,1% del territorio asistencial de la provincia, cifra que tras la última evaluación de mayo de 2025 ha alcanzado el 61,3%. Este considerable incremento refleja la rapidez y gravedad con la que se está deteriorando la atención sanitaria básica en Sevilla.
Mientras que anteriormente un 6,6% de los ciudadanos sevillanos sufría escasez de profesionales médicos, esta cifra se ha elevado al 19,5% en la actualidad. Esto significa que, a día de hoy, casi una de cada cinco personas en la provincia vive en una zona donde es extremadamente complicado cubrir las necesidades sanitarias esenciales.
Situación grave en municipios sevillanos
El informe técnico presentado por el SAS indica que el problema está directamente relacionado con condiciones laborales precarias y la falta de incentivos reales. En Sevilla capital, el 13,19% de las ofertas temporales no se cubren, y la situación empeora en áreas periféricas, como en Cazalla de la Sierra, Constantina, Santa Olalla de Cala, Lora del Río, Carmona, La Rinconada y Cantillana, donde el porcentaje de ofertas laborales temporales no cubiertas llega hasta el 100%.
La situación es especialmente grave en Las Cabezas de San Juan (100%), Lebrija (96,97%), Alcalá de Guadaíra (96,94%) y Los Palacios (72,88%), mostrando tasas alarmantes de ofertas no cubiertas. Otras zonas como Marchena (98,54%), Écija (97,41%) y Estepa (100%) confirman una alarmante situación de rechazo sistemático de ofertas laborales.
Las soluciones del SMA
Ante esto, el Sindicato Médico Andaluz (SMA) pide incentivos económicos adecuados que reconozcan la complejidad y la especificidad del trabajo en estas zonas, y contratos de larga duración, estables y atractivos, que permitan fidelizar al personal sanitario. Además, propone una reducción de la sobrecarga asistencial mediante la limitación de cupos y del número de pacientes atendidos por día.
Otras de las soluciones que proponen son la disminución de la carga burocrática y garantía de cobertura total de los cupos médicos, evitando sobrecargas sobre el personal existente, así como la implementación de un plan específico para revertir la creciente tendencia de zonas calificadas como de difícil cobertura.