Cada año, del 20 al 27 de marzo, la Iglesia Cristiana Palmariana de los Carmelitas de la Santa Faz celebra su particular Semana Santa en El Palmar de Troya. A diferencia de la Semana Santa tradicional del calendario católico romano, cuya fecha varía en función del calendario lunar, la Semana Santa Palmariana se mantiene fija, con el 25 de marzo como Viernes Santo, por considerar que fue ese día el de la crucifixión de Jesucristo.

Este rito, que se celebra en la sede de esta iglesia independiente —nacida a raíz de supuestas apariciones marianas en 1968—, tiene lugar dentro del recinto de la llamada Catedral-Basílica del Palmar de Troya. Se trata de una celebración que no sigue los cánones litúrgicos de la Iglesia Católica, ya que la Palmariana no reconoce como legítimos a los papas posteriores a Pablo VI y sostiene que la sede de la Iglesia fue trasladada en 1978 desde Roma hasta El Palmar.

Durante esta semana, cada noche a partir de las 21:00 horas, se celebran solemnes procesiones en el interior del recinto. Las puertas del templo se abren para permitir la salida de pasos religiosos, acompañados de coros que representan a ángeles y de una banda de música. Se trata de una liturgia muy cuidada y revestida de solemnidad, que se desarrolla de forma interna, sin participación externa ni acceso libre al público general, dada la naturaleza cerrada de esta congregación.

A pesar de su reducido número de fieles, la Iglesia Palmariana ha generado durante décadas un notable interés mediático por sus rituales particulares, su estructura jerárquica propia y su calendario religioso diferenciado, siendo la Semana Santa uno de los momentos más visibles de su año litúrgico.