Esta historia comienza durante la pandemia de Covid en el año 2020. En aquellos días, cuenta la directora del CEIP San Roque de Arahal, Alicia Lobato, tuvieron que desalojar algunas estancias del centro, el más antiguo de Arahal, donde se encontraron con parte de su historia recogida en documentos y fotografías. En ese momento, sólo pensaron en proteger este archivo porque fueron conscientes, en un primer vistazo, que tenía un valor incalculable y lo que estaba en cajas de cartón, algunas en mal estado, lo pasaron a cajas de plástico.
Hace unos días, han comenzado a recuperar este interesante archivo y le han pedido al afamado diseñador Alfonso Pereira que le eche una mano para digitalizarlo y ponerlo a disposición de cualquier persona interesada. Y ha sido justo en este momento, después de anunciarlo en las redes sociales, cuando se han dado cuenta de la atención que despierta la historia de un colegio que en 2024 ha cumplido 75 años.
Alicia Lobato tiene su despacho con documentos repartidos por todos los muebles en un intento de avanzar en el desalojo del antiguo archivo del colegio. Cuenta que este descubrimiento empezó durante los días de la pandemia de covid: «Tuvimos que desalojar el mobiliario de las estancias del centro para poder ventilar las aulas. Los muebles los subimos a un trastero que hay encima del gimnasio y allí encontramos las carpetas y cajas llenas de fotos y sus negativos, cintas de vídeos, documentos de la época». Dejaron para mejor ocasión mirar los documentos con la atención que requieren y, hace unas semanas, comenzaron con la tarea, lentamente porque la directora del centro tiene que compaginar este trabajo con su actividad diaria.
Pero, de momento, han llegado a un acuerdo con Alfonso Pereira, diseñador que tiene en su trayectoria trabajar con empresas muy importantes del territorio español. Es antiguo alumno del centro y, además, padre de tres pequeños que van también a San Roque y a los que deja cada mañana en la puerta. Fue ahí exactamente donde Alicia Lobato lo abordó y le dijo: «Alfonso tienes que hacerme un logo para celebrar el 75 aniversario». La propuesta acabó en trato: «Te lo hago si a cambio me dejas digitalizar el archivo del centro».
Ese mismo día dieron los primeros pasos en la recuperación de la historia gráfica y documental del colegio: «Entre los archivos había una carpeta con fotos de un trabajo que había hecho el alumnado». Las fotos son un documento gráfico que define la vida en Arahal durante la década de los 90. Fotos y negativos se han encontrado, todo metido en sus correspondiente sobre de revelado, como antiguamente la entregaban. Y el alumnado se centró en recoger las imágenes de la vida que se iba encontrando por las calles, plazas, en el mercadillo, gasolineras, estación de tren, en antiguas zapaterías, bares, plaza de abastos, estancos, casas en el campo (cercano al casco urbano) y tiendas.
Las imágenes tienen el tono desvaído de los primeros revelados en color
Han desaparecido parte de las actividades que muestran, los negocios e, incluso, las personas pero están vivas en el recuerdo de muchos arahalenses. El asalto a la memoria colectiva de las imágenes recogidas por el antiguo alumnado del colegio San Roque ha supuesto más de 25.000 visualizaciones en las redes sociales del diseñador que quiso mostrar la importancia de este documento gráfico.
A día de hoy, todo lo recopilado conforma un archivo de un gran valor porque se trata de documentos que reflejan parte de la vida del colegio y del pueblo donde está ubicado, cómo se realizaban las labores administrativas de un centro educativo antes de que existiera el programa Séneca, qué documentos necesitaba el alumnado para ser matriculados y otras cuestiones curiosas.
Hay promociones de selecciones deportivas con fotos en blanco negro que fueron campeones en el curso 1972-1973 firmada por el profesor de Educación Física, Francisco Blanco Sánchez. Documentos del Ministerio de Educación Nacional, Dirección General de Enseñanza Primaria que acreditaban el Certificado de Escolaridad del año 1959. O el título de uno de los primeros maestros que tuvo el centro, Agustín Tello Sánchez, firmado por S. M. el Rey Don Alfonso XIII expedido en marzo de 1931. Incluso ha aparecido una entrevista que los alumnos hicieron a Manolo Jiménez, cuando empezó a jugar en el Sevilla F.C., hace más de treinta años y el registro del primer alumnado que tuvo el centro. El tiempo ha pasado por ellos y en algunos la tinta ha desaparecido porque antes todo se escribía a mano: «Hay documentos que ya no se pueden digitalizar y se han perdido pero otros que formarán parte del próximo archivo histórico digitalizado del colegio».
El cronista oficial de la villa, Rafael Martín, investigador de la historia de Arahal, que detrás del colegio de San Roque «hay una historia fascinante que se remonta a 1836, cuando, tras la desamortización, la orden franciscana alcantarina dejó el convento del mismo nombre en el que estaban desde 1624. Ya entonces, la cesión del edificio quedó clara debería dedicarse a la educación pública». Tardaría todavía un siglo en cumplir con esta condición, el centro comenzó a funcionar en 1950.
El primer nombre que recibió el colegio fue en honor al Gobernador Civil Fernando Coca de la Piñera que impulsó con una considerable aportación económica (100.000 pesetas) la transformación del edificio para que fuera utilizado con un fin educativo. Cuando abrió, el edificio albergaba nueves aulas o escuelas, nombre como, según el cronista, se conocía a las unidades escolares en aquellos años en los que Arahal contaba con una población de 14.549 habitantes y 1.080 niños en edad escolar. «El absentismo escolar era preocupante alcanzando un 35 por ciento en la enseñanza obligatoria», apunta Rafael Martín.
La investigación del cronista apunta que las aulas del nuevo centro estaban diseñadas para ser amplias, con capacidad para 22 pupitres bipersonales, «podían albergar hasta 44 alumnos». Asimismo, en cuanto al material y la decoración, elementos que han encontrado también en los archivos del colegio, las aulas estaban presididas por una foto de Franco y un crucifijo que «representaban la conexión entre la educación y los valores católicos, así como la autoridad del régimen político del momento», apunta Martín.
El segundo nombre que ha tenido el centro a lo largo de su historia es ‘Maravilla Segura’. La directora ha encontrado entre los documentos un contrato realizado a una maestra datado en 1933, año en el que ya figura su nueva denominación y listas de alumnado escritas a mano de la década de los 50.
La historia del colegio más antiguo de Arahal
Con todo lo encontrado quieren llevar a cabo varios proyectos. «Ahora mismo tengo un lío enorme, con el despacho lleno de documentos para dedicarle el tiempo que me permite mis otras funciones como directora», dice Alicia Lobato. Entre estos proyectos está montar «el pasillo de la fama con fotos del alumnado más ilustre».
Cada día Alicia descubre documentos «muy curiosos» como uno escrito a mano del plan urgente de alfabetización que acabaron con la apertura de otros dos centros educativos en el pueblo, primero el CEIP El Ruedo, segundo en antigüedad, y más tarde el CEIP Manuel Sánchez Alonso. «Me gustaría entregar a cada uno de estos centros una copia del documento», es otra de las actividades que tienen previsto organizar. Además de montar una exposición con todo lo encontrado.
Exponer todo lo encontrado en el colegio más antiguo de Arahal será mirar atrás para poder comprobar lo que ha cambiado la educación en España. Y para empezar esta puesta en valor de la historia del centro, el viernes 7 de febrero inauguran un azulejo conmemorativo en el que aparece la intrínseca relación entre el colegio y la iglesia, antiguo convento de San Roque cuya fundación ha cumplido cuatro siglos en 2024.