Los vecinos denunciaron que el incendio de un transformador dejó este martes sin luz a buena parte de los vecinos de Burguillos «debido al enganche ilegal de más de 350 viviendas» según los mismos vecinos. El fuego movilizó a un retén de bomberos y a miembros de la Guardia Civil por el denso humo negro que provocó, junto a la travesía, según han coincidido los vecinos y el Ayuntamiento de esta localidad de la Vega del Guadalquivir.
Sevilla Actualidad. En torno a las 21:30 horas del martes, cientos de vecinos de Burguillos quedaron sin luz. El motivo: el Centro de Transformador de Corriente (CTC) que suministra la electricidad a las urbanizaciones Villas del Rubial, Señorío de Burguillos y otras zonas de Burguillos salió ardiendo, lo que movilizó a bomberos y efectivos de la Guardia Civil que se personaron inmediatamente en la zona, dada la cercanía del transformador con la travesía.
El fuego se produjo tras una sobrecarga que causó el calentamiento de los conductores, lo que los vecinos atribuyen al «enganche ilegal» al sistema de 350 viviendas a las que el Ayuntamiento burguillero «no es capaz de ofrecer suministro eléctrico normal» desde que las adquirieron hace más de dos años y medio.
Este CTC depende directamente de Endesa, compañía que provisionalmente ha instalado un grupo electrógeno móvil que abastece a los vecinos afectados mientras los operarios de arreglan, desde primera hora de ayer, los desperfectos que el incendio ha provocado.
Las protestas de los vecinos han sido una constante en los últimos años en Burguillos, especialmente por parte de la Asociación de Vecinos ‘Nuevo Burguillos’, quienes mantienen un pulso con el Ayuntamiento de Burguillos -que gobierna la socialista Mariana Pérez tras la dimisión este año de José Juan López- al que acusan de no solucionar los continuos problemas de las urbanizaciones de nueva planta, con cortes de electricidad que sufren debido a los problemas de los grupos electrógenos, deficiencias en el abastecimiento de aguas en verano o la carencia de teléfono e Internet en sus viviendas.
La asociación vecinal agrega que cada día se corta la luz durante más una de hora a otras 400 viviendas de la misma zona cuyo suministro depende de grupos electrógenos que en horas punta no proporcionan la energía necesaria, «sobrecargándose y apagándose automáticamente hasta que algún vecino se acerca a rearmarlos».