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El salario medio de jóvenes en Andalucía no supera los 900 euros netos mensuales. Los precios de alquiler y compra de viviendas no facilitan la emancipación, ya que requieren destinar más del 50% del salario medio.

Los datos del primer Observatorio de Emancipación de Andalucía arrojan cifras muy negativas para los jóvenes andaluces. Cifras que pivotan ligeramente en función de las provincias. En el caso de Sevilla, la tasa de jóvenes (entre 16 y 29 años) empleados es del 29,2%, en la línea andaluza, donde la tasa de empleo es del 29,7%, varios puntos por debajo de la media española que alcanza el 36,2%.

Esto conlleva que pocos jóvenes puedan salir de casa. En Sevilla, la tasa de emancipación de jóvenes en el cuatro trimestre de 2015 es de 17,5%, ligeramente superior a la media de Andalucía, que se sitúa en el 17,2%. Por encima de Sevilla se encuentran provincias como Granada (tasa de emanciación del 25,5%) o Almería (24,4%). Por debajo, provincias como Jaén (11,1%) o Cádiz (12,4%). La media en España se sitúa en el 20,5%.

Este informe inicia su andadura con otro dato demoledor: más de 600.000 jóvenes se encuentran en riesgo de exclusión o pobreza, según la tasa Arope. Un cifra que asciende al 47% del total de jóvenes en Andalucía, frente al 36% de España. 

Andalucía destaca a nivel estatal por la situación de precariedad, ocupando la tasa más alta de España en temporalidad, con el 70% de los empleos. Sumándole a ello que el 98% de los nuevos contratos creados son temporales. Desde que empezó la crisis no ha dejado de crecer la contratación de menos de una semana (del 20% en 2008 al 30% en 2015). La subocupación (trabajar menos horas de las que se querría y podría) afecta ya al 40,7% de jóvenes, perjudicando más a mujeres que a hombres, con una diferencia del 10%.

El salario medio de jóvenes en Andalucía no supera los 900 euros netos mensuales. Los precios de alquiler y compra de viviendas no facilitan la emancipación, ya que requieren destinar más del 50% del salario medio. La situación se acentúa en provincias como Málaga, donde es necesario emplear el 70,1% del salario para poder emanciparse o Sevilla, donde se requiere el 60% del salario para vivir de alquiler, lo que provoca una situación de «sobreendeudamiento» para los jóvenes andaluces.

Estos datos complican las oportunidades de desarrollo de la juventud andaluza, haciendo que muchas personas se den ya por vencidas y dejen de buscar un empleo que garantice su presente, alcanzando una tasa de inactividad del 46% de las personas jóvenes.

“La frustración y desafección política que se genera como consecuencia, provoca una gran desconfianza en las instituciones públicas”, explica Lorena Rodríguez, presidenta del Consejo de la Juventud de Andalucía. Por su parte, Julia Chica, presidenta del Consejo de la Juventud de España, añade que “la aplicación efectiva de Garantía Juvenil en Andalucía ayudaría a mejorar la situación, programa que por el momento no se está llevando a cabo de manera eficiente en este territorio”.

Los planes de retorno de Andalucía parecen no dar sus frutos debido a la «grave» situación que atraviesa la Comunidad Autónoma. Las personas jóvenes de la región prefieren emigrar a otras comunidades autónomas con un mayor PIB para buscar sus oportunidades en lugar de emigrar a países extranjeros. “Esta situación conlleva a que en Andalucía la juventud no hipoteque viviendas, sino que hipoteque proyectos personales de vida”, concluye Rodríguez.