Agente de la Policía Nacional junto a los tornos del metro
Agente de la Policía Nacional junto a los tornos del metro

La Policía Nacional ha detenido en Murcia a un hombre como presunto responsable de un delito de difusión de pornografía infantil. El autor de los hechos, quien ya ha pasado a disposición judicial, es el principal investigado por también compartir contenido de carácter violento. Creó un grupo de Telegram que aglutinaba a miles de usuarios y donde no existía ninguna restricción de edad. En este espacio cibernético los usuarios vendían drogas, armas y traficaban con contenido de explotación sexual.

El pasado mes de junio se organizó un operativo policial para la localización del administrador de estas cuentas, en la que se realizó una entrada y registro de su vivienda donde se intervinieron teléfonos móviles, ordenadores y memorias USB. El Grupo de Menores de la Jefatura Superior de Policía Nacional en la región de Murcia, quienes han sido fundamentales en el proceso según indica el abogado penalista Luis Ferrer, ha solicitado a la autoridad judicial el cierre de todas las cuentas de las que era propietario el investigado. Aunque aún no hay sentencia ni juicio oral previsto, el letrado recuerda la importancia de que las víctimas «actúen decididamente» para impulsar la causa y así puedan «solicitar pruebas, diligencias y medidas cautelares».

Usuarios entre los 12 y los más de 30 años

La mayoría del contenido se compartía a través del grupo que el detenido creó en la red social Telegram. Los usuarios, que comprendían edades entre los 12 y los más de 30 años, tenían acceso a apuestas deportivas, productos falsificados, violencia explícita —como peleas de menores y vídeos gore–, así como pornografía infantil. El detenido habría podido estar fomentando riñas entre adolescentes, llegando a pagar a menores de edad por la grabación de agresiones en sus centros educativos o en la vía pública.

La investigación se inició en 2023, cuando unos padres denunciaron que su hijo había sido agredido en el colegio, y que la agresión había sido grabada y difundida a través de las redes sociales. También fue fundamental la colaboración a través de la web y los correos electrónicos que la Policía Nacional pone a disposición de la ciudadanía (denuncias.pornografia.infantil@policia.es), pues la plataforma donde sucedieron los hechos no suele poner trabas en la difusión de este tipo de contenido.

Aunque según la red social el año pasado bloqueó a 700.000 canales relacionados con pornografía infantil, la realidad es que ‘El rey de Murcia’ llevaba operando con impunidad desde 2022. Otros miles de grupos como éste pasan desapercibidos ante el filtro que la plataforma dice tener. Según fuentes de la acusación particular, hay muchas más denuncias de otros menores —sobre todo de chicas— que se están remitiendo a la Fiscalía de Menores.