El Betis cumplió y lo hizo con nota en Murcia, en un partido serio de los de Pellegrini que les sirvió para clasificarse para los octavos de final y dar un nuevo paso en la Copa del Rey. Cucho abrió el marcador desde el punto de penalti y Piñeiro se marcó en propia meta el definitivo 0-2 tras una buena acción de Aitor Ruibal.
Adrián San Miguel se reivindicó en suelo murciano con una gran actuación, evitando en varias ocasiones el gol del empate del Murcia antes del descanso, lo que podría haber cambiado el devenir del encuentro.
Antes del pitido inicial se vivió un momento emotivo en el estadio Enrique Roca, con el número uno del mundo, Carlos Alcaraz, realizando el saque de honor. Los murcianos, arropados por su afición, salieron con intensidad y fueron los primeros en crear peligro con un centro de Mier que remató de volea en el segundo palo, aunque la zaga verdiblanca consiguió rechazarlo. Respondieron los de Heliópolis con un centro de Ángel Ortiz que remató Pablo García atacando el primer palo, pero el balón se marchó por encima de la portería.
Con el paso de los minutos, el Betis fue haciéndose con el control del encuentro, presionando arriba para recuperar rápido el balón. Los de Colunga intentaban estirarse cuando podían y, en una acción a la contra, sorprendieron a la defensa verdiblanca algo descolocada, aunque Ángel Ortiz llegó a tiempo para taponar el disparo de Flakus.
Cucho abrió el marcador y Adrían San Miguel evitó el empate con varias intervenciones de nivel.
Chimy Ávila probó fortuna desde fuera del área con un remate que se marchó desviado. A la media hora de partido, un buen centro de Ángel Ortiz lo ganó Cucho, que controló en la frontal y su disparo tocó en el brazo de Alberto González, por lo que el árbitro no dudó en señalar penalti. El propio Cucho fue el encargado de lanzarlo y convertirlo, a pesar de que Piñeiro adivinó la dirección del remate.
Los pimentoneros dispusieron de una triple ocasión para empatar el encuentro, pero entre Adrián San Miguel y el Cucho lo evitaron tras los disparos de Jorge Sánchez y Alberto González. A balón parado, el Murcia volvió a poner en apuros al Betis, pero volvió a aparecer Adrián con dos grandes paradas de nivel, primero al disparo de Flakus y después al cabezazo de Jaso. La última ocasión de la primera mitad fue para Deossa, que tras una de sus habituales zancadas sacó un remate que fue desviado por un rival y estuvo cerca de acabar en el fondo de la red.
Pellegrini, tras los sustos del tramo final del primer tiempo, no quería relajaciones y realizó un doble cambio, dando entrada a Pablo Fornals y Ricardo Rodríguez. La primera acción peligrosa de la segunda mitad llegó tras una gran dejada de tacón de Riquelme, que permitió a Ángel Ortiz pisar el área, aunque su disparo con la derecha fue enviado a córner por Alberto González.
El Betis intentó controlar el encuentro a través de posesiones largas, mientras que el Murcia buscaba el contragolpe, como en una acción de Flakus que salió en velocidad, pero cuyo disparo, tras tocar en un defensor, acabó en las manos de Adrián San Miguel.
Los de Pellegrini también supieron correr y, aprovechando la frescura de Antony, pudieron aumentar la renta con un disparo desde fuera del área que detuvo Piñeiro. Precisamente a la contra llegó la acción que cerró el encuentro. Fornals peinó el balón para Aitor Ruibal, que se plantó solo ante Piñeiro y el guardameta detuvo el primer disparo, pero el balón salió hacia atrás y, entre Piñeiro y Héctor Pérez, acabó introduciéndose en la portería en propia meta.
Un partido serio del Betis, que se clasifica para los octavos de final de la Copa del Rey y ya encara su último partido de 2025, en el que recibirá al Getafe en el Estadio de La Cartuja.
