El Real Betis Balompié firmó una victoria de prestigio en la UEFA Europa League al imponerse por 1-3 al Dinamo Zagreb en el Stadion Maksimir. Los verdiblancos se presentaron con decisión y control desde el pitido inicial, y consiguieron golpear primero en un campo tradicionalmente complicado para los equipos españoles.

El primer tanto llegó en el 31’, cuando Sergi Domínguez marcó en propia puerta tras un centro peligroso del Betis, poniendo el 0-1 para los visitantes.

Solo tres minutos después, en el 34’, Rodrigo Riquelme amplió la ventaja con un disparo potente que desató la euforia en la afición verdiblanca desplazada hasta Croacia.

En el 38’, Antony certificó el dominio verdiblanco con un tercer gol, aprovechando un error defensivo local para colocar el 0-3 antes del descanso.

Ya en la segunda mitad, el Dinamo Zagreb recortó distancias en el 89’ con un cabezazo tras un córner de Galešić, pero el Betis supo mantener la victoria hasta el final.

Primer tiempo perfecto: intensidad y eficacia

Desde el inicio, el Betis mostró un planteamiento ofensivo claro, presionando alto y tratando de desbordar por las bandas. La estrategia dio frutos cuando, en el 31’, tras un centro desde la derecha, Sergi Domínguez introdujo el balón en su propia portería y el Betis se adelantó 0-1 en el marcador.

El equipo dirigido por Manuel Pellegrini no se conformó con esa renta inicial y continuó insistiendo en bloque alto. Solo tres minutos después, en el 34’, Rodrigo Riquelme recogió un balón en zona peligrosa y, con un derechazo firme y colocado, marcó el segundo gol que daba aún más aire al Betis.

La presión y el ritmo del Betis no bajaron y, en el 38’, Antony culminó un movimiento colectivo con maestría, aprovechando un error defensivo local para firmar el 0-3 antes de llegar al descanso.

Ese primer tiempo quedó marcado por la victoria parcial con una renta amplia, la solidez defensiva y la claridad ofensiva de un Betis que supo interpretar mejor las transiciones durante los primeros 45 minutos.

Segunda mitad: control, reacción y gestión

Tras el descanso, el Dinamo Zagreb intentó una respuesta más agresiva para intentar meterse en el encuentro. El equipo croata subió líneas y buscó desbordar por los costados con balones más directos, tratando de poner en aprietos a la defensa visitante.

El Betis, con una ventaja amplia y control del tempo, administró con inteligencia sus recursos, manteniendo orden en la retaguardia y alternando posesiones para frenar los embates rivales. El guion del partido fue de dominio visitante sin renunciar a dejar espacios para la presión local.

En el 89’, el Dinamo Zagreb consiguió finalmente batir la portería verdiblanca tras un saque de esquina, cuando Galešić conectó de cabeza para anotar el 1-3 y dar algo de esperanza a la afición local.

Sin embargo, ese tanto no fue suficiente para alterar el desenlace. El Betis resistió con orden, retomó la posesión y mantuvo la victoria hasta el pitido final, asegurando así tres puntos de enorme valor en su grupo de Europa League.

La victoria por 1-3 en Zagreb no solo supuso tres puntos importantes para el Betis en la fase de grupos de la Europa League, sino que también reafirmó la confianza del equipo en su propuesta futbolística.

Con un rendimiento notable fuera de casa y demostrando que puede competir con equipos históricos en sus estadios, el conjunto verdiblanco se presenta con argumentos sólidos para pelear por los primeros puestos del grupo y soñar con avanzar en el torneo continental.

Además, el hecho de haber marcado tres goles en una visita europea de alto nivel refleja la claridad ofensiva y las soluciones que posee el equipo en momentos determinantes.

Este triunfo en Zagreb, cimentado en una primera mitad casi impecable y una segunda parte de control, refuerza la victoria de un Betis ambicioso que aspira a seguir haciendo historia en Europa.