El Real Betis inicia su camino en la Europa League con la presión y ambición de una temporada en la que llega como cabeza de serie. La clasificación en el bombo 1 le asegura cierta ventaja inicial, aunque el riesgo de medirse contra equipos de gran factura permanece latente.
En el bombo 1, Betis comparte privilegios con clubes como Roma, Oporto, Rangers, Feyenoord, Lille, Dinamo Zagreb y Aston Villa—lo que implica que podría enfrentarse a alguno de ellos como rival directo, en particular contra clubes de su mismo bombo en el sorteo. Además, la normativa europea impide cruces con equipos de su misma asociación, descartando enfrentamientos con el Celta, otro club español clasificado. Aunque podría darse un encuentro con mucho morbo como sería contra el Aston Villa de Monchi.
Mirando al bombo 2, se vislumbra otra amenaza moderada: Lyon, Fenerbahçe y Celtic podrían convertirse en un duro rival, con estilos tácticos variados y experiencia europea considerable. En los bombos 3 y 4, la lista incorpora a clubes como Nottingham Forest, Friburgo, Bolonia, Stuttgart o Celta de Vigo, representando variantes competitivas menos previsibles y con menor presión mediática, pero no exentas de riesgo.
De este modo, si el sorteo empareja al Betis con un rival potente de su mismo bombo o de los siguientes, el equipo de Pellegrini deberá hacer gala de su experiencia internacional reciente—tal como lo mostró en su reciente final de Conference League—para mantener vivas sus opciones de avanzar en la competición.
En cuanto al calendario, la fase de liga de la Europa League arrancará entre el 24 y el 25 de septiembre de 2025, con hasta ocho jornadas que proseguirán hasta enero de 2026. Al finalizar, los ocho primeros en la tabla avanzarán directo a octavos, mientras que los clasificados entre el 9º y el 24º disputarán un playoff—indicando que una mala clasificación en esta fase aún permitiría al Betis aspirar a continuar en competición.
El sorteo de la fase de liga se celebrará el 29 de agosto de 2025 en Nyon, Suiza. Ahí se despejarán los posibles cruces y comenzarán a perfilarse los verdaderos rivales que el Betis deberá enfrentar. Hasta entonces, los aficionados pueden especular con enfrentamientos de alto riesgo con clubes consolidados como Lyon, Oporto o Roma, o con incógnitas interesantes como Bolonia, Friburgo o Forest.
El Real Betis encara la próxima Europa League con el respaldo de ser cabeza de serie, pero sin liberarse del riesgo que supone un sorteo riguroso. Su clasificación final en la fase de liga será clave para definir su camino y futuro en la competición. El club verdiblanco se enfrenta a variados rivales desde el bombo 1 al 4, lo que abre un abanico de posibilidades tanto apasionantes como exigentes.