La peregrinación de los aficionados del Real Betis para presenciar la histórica final de la Conference League en la ciudad polaca de Breslavia ha dejado anécdotas dignas de ser contadas como este trato de una fanática del ‘glorioso’ con otra sevillista. Teresa, bética de corazón, firmó un pacto insólito con su amiga sevillista en medio de una conversación entre risas y bromas: «Si el conjunto verdiblanco lograba plantarse en la final, ella correría con los gastos del viaje». Lo que empezó como una apuesta sin mayores pretensiones, hoy le pasa factura y no solo en lo sentimental.
Llegar a la final implica un desembolso importante entre vuelos, alojamiento y entradas, además de un trayecto nada fácil: precios disparados, combinaciones complicadas y ciudades intermedias para poder cuadrar el viaje hasta Breslavia. Aun así, Teresa lo tuvo claro desde un primer momento: por ver al Real Betis luchar por un título europeo por primera vez en su historia, todo esfuerzo merece la pena. «Mi amiga es sevillista y me dijo que si el Real Betis llegaba a la final, me regalaba los vuelos… y así ha sido», confiesa en alusión al trato que hizo con su amiga sevillista para estar este miércoles con el Real Betis en Breslavia.
El viaje de Teresa comenzó en Sanlúcar de Barrameda, de donde es esta bética de corazón. Desde allí, se desplazó en coche hasta Sevilla, continuó por carretera hasta Valencia y, desde allí, tomó un avión con destino a Polonia. No hay comodidad ni rapidez en el trayecto, pero sí una motivación que lo justifica todo: estar presente en una noche histórica para el beticismo.