La Hermandad de Nuestra Señora de Valme Coronada, protectora de Dos Hermanas (Sevilla), trasladará este viernes, 24 de noviembre, a la imagen de la Virgen en un vehículo descapotable desde la localidad nazarena hasta la capital andaluza.
La venida de la Virgen de Valme responde a los actos conmemorativos por el 775 aniversario de la Reconquista de la Ciudad de Sevilla, el 23 de noviembre de 1248, por el rey castellano Fernando III, «el Santo».
La corporación nazarena lleva una semana inmersa en un enérgico programa de actos memorativos, cuyo plato fuerte es la procesión extraordinaria del sábado, 25 de noviembre, en la que la Titular Gloriosa acompañará a la imagen de San Fernando, patrón de Sevilla, en su discurrir por los aledaños de la Catedral.
La Virgen de Valme en Sevilla
La patrona del Ayuntamiento de Dos Hermanas saldrá este viernes, 24 de noviembre, de su parroquia de Santa María Magdalena, a las 17:30 horas. Para posibilitar la «veneración pública de los fieles y devotos», Nuestra Señora de Valme se dirigirá «en vehículo descubierto» hacia la Plaza Menéndez Pelayo. Allí, en el monumento erigido en su honor, se hará la despedida oficial, «prosiguiendo después su recorrido de forma reservada».
A las 19:15 horas, una vez la comitiva llegue a la capital, la Virgen se trasladará en andas desde el Palacio Arzobispal hasta la Catedral. Antes de acceder al templo catedralicio, la imagen de Nuestra Señora se detendrá ante el monumento de San Juan Pablo II para hacer una ofrenda floral. El acompañamiento musical correrá a cargo de la Escolanía de la Asociación Musical Nazarena «Regina Coeli»,
Ya en el interior, la Virgen será entronizada en la Capilla Real junto al cuerpo incorrupto de San Fernando. Allí, a las 20:00 horas, el M. I. Sr. D. Adrián Ríos, canónigo de la Catedral, presidirá una eucaristía previa a su traslado al Altar del Jubileo.
Un traslado y una procesión con 75 años de historia
Aunque parezca novedoso y llamativo, no es la primera vez que Valme se traslada a la capital hispalense y lo hace en un vehículo descapotable.
El domingo, 21 de noviembre de 1948, con motivo del séptimo centenario del Restablecimiento del Culto Cristiano en la Ciudad de Sevilla, la imagen de la protectora de Dos Hermanas hizo un traslado similar al que va a hacer ahora 75 años después.
Eran las 17:00 horas de aquel domingo de noviembre cuando, al volante de su vehículo a motor, don Carlos Delgado de Cos, vecino nazareno, aguardaba en la Venta de Las Palmas la llegada de una pasajera muy particular. Era una Madre que traía en brazos a su Hijo. Quizás la Madre más querida por los escasos 20.000 habitantes del municipio sevillano. Se trataba de Nuestra Señora de Valme.
Acompañada por el entonces hermano mayor, don Isidoro Peña, y el párroco del momento, don Manuel García Martín, la talla fernandina llegó directamente a la Catedral. Su venida fue la respuesta a la invitación que el Cardenal Segura hizo a la hermandad para que participara en la magna procesión del martes, 23 de noviembre de 1948, que festejaba los 700 años de la Reconquista de Sevilla.
La Virgen, acompañada, entre otros, por un centenar de miembros de la Hermandad con el Pendón del Santo Rey, salió por la Puerta de San Miguel a las 16:30 horas. Más tarde se dirigió al Ayuntamiento entronizada en el palio «de tumbilla» de la Señora Santa Ana de Dos Hermanas.
La comitiva procesional estuvo compuesta aquella jornada por numerosas advocaciones vinculadas al Rey Santo castellano. Entre todas las que asistieron destacaron la Virgen de los Reyes, patrona de la Archidiócesis, y la Virgen de las Batallas.