La bola de fuego que ha sobrevolado el cielo de varias provincias andaluzas.

La madrugada del pasado 6 de septiembre, a las 5:32 horas, el cielo andaluz fue escenario de un fenómeno astronómico de gran impacto visual: una bola de fuego que cruzó a gran velocidad varias provincias de Andalucía, dejando una estela brillante que pudo contemplarse desde amplias zonas de la Península Ibérica.

El bólido —denominación que los astrónomos dan a estas rocas espaciales al entrar en contacto con la atmósfera— se inició a 81 kilómetros de altitud sobre el municipio de Los Corrales (Sevilla). Desde allí continuó su trayectoria a 79.000 kilómetros por hora en dirección noreste, sobrevolando el norte de la provincia de Málaga. Finalmente, se extinguió a 34 kilómetros de altura sobre Priego de Córdoba.

El fenómeno fue registrado por los sistemas de detección del proyecto SMART, que coordina el astrofísico José María Madiedo, con cámaras situadas en distintos observatorios andaluces. Los expertos han confirmado que la bola de fuego fue producida por una roca desprendida de un asteroide, que al entrar en la atmósfera generó la intensa luminosidad que sorprendió a quienes madrugaban o se encontraban al aire libre a esa hora.

La imagen captada muestra con claridad la trayectoria de la roca durante su paso por la atmósfera terrestre. La brillantez del fenómeno fue tal que numerosos testigos lo describieron como una luz intensa que iluminó el cielo nocturno durante unos segundos.

Este tipo de bólidos son relativamente frecuentes, aunque no siempre alcanzan una luminosidad tan destacada ni logran ser visibles desde una extensión tan amplia. En este caso, su resplandor pudo contemplarse desde distintos puntos de Andalucía y de la Península, generando expectación y asombro entre quienes fueron testigos del espectáculo cósmico.