Los sindicatos UGT, CSIF, y CC.OO, junto al Comité de Empresa del Ayuntamiento de Alcalá de Guadaíra se oponen a la privatización del servicio público. Lo que supondrá dejar «de patitas en la calle» a los monitores de la piscina y a sus 8 empleados. Los sindicatos no encuentran problemas de rentabilidad económica para la privatización. Pero si aseguran “una pérdida de calidad del servicio” con ella. La protesta cuenta con el apoyo del PA y forma parte del calendario de movilizaciones acordado la pasada semana entre unos 300 de los 600 trabajadores del Ayuntamiento de Alcalá.
Sevilla Actualidad. Las secciones sindicales de UGT y CC.OO en el Ayuntamiento de Alcalá, junto con el propio Comité de Empresa del Ayuntamiento de Alcalá y la Central Independiente de Funcionarios –CSIF- han convocado una rueda de prensa a las 11:00 horas de esta mañana. El objeto de la misma es la entrega a los miembros del Ayuntamiento de las 2.000 primeras firmas que se han recogido contra la privatización de la piscina municipal de Los Alcores.
En el acto de entrega de las firmas participarán alumnos y usuarios de la piscina municipal cubierta, así como los monitores y una representación de empleados y representantes sindicales de los 600 trabajadores del Ayuntamiento de Alcalá. El objetivo es parar la privatización de la piscina pública, evitando así el despido de sus monitores y de 8 empleados de la misma.
Fue a inicios de este mes, cuando los sindicatos UGT y CC.OO. lanzaron un comunicado conjunto en el que rechazaban la externalización de los servicios de la piscina de Los Alcores. El principal argumento en contra de la privatización era y sigue siendo, el hecho de que la nueva empresa adjudicataria no esté obligada a subrogar –sustituir- al personal.
A esto se une las recomendaciones hechas por el Ayuntamiento en el Estudio de Viabilidad realizado para la Redacción del Pliego Técnico correspondiente a la privatización, en las que aconsejaba un “recorte personal”, por considerar “sobredimensionado el número de profesionales existentes”.
Además de ello, las protestas de los sindicatos, a las que más tarde se le uniría el Partido Andalucista de Alcalá, señalaban que no hay motivos de rentabilidad económica para la privatización. Puesto que los ingresos obtenidos tanto por los cursos de natación o de nado libre –donde la piscina presta más de 5.500 servicios anuales-, permiten “sostener y mejorar este servicio público, incluso abaratando las actuales tasas municipales”.
Por el contrario, los detractores de la privatización aseguran que “ésta como todas las privatizaciones municipales conllevará el deterioro de la calidad del servicio”. Algo que ratifica, siempre según los sindicatos, el ya privatizado mantenimiento del agua de la piscina cubierta, en la que “hemos pasado de recibir felicitaciones por la calidad del agua a tener que cerrar las instalaciones, en diversas ocasiones, por su deterioro”.
Por todo ello, las asociaciones creen que con esta privatización “se quiere poner al servicio del beneficio económico empresarial privado, las instalaciones y los recursos de un servicio público”, que ha sido financiado con “el esfuerzo de todos los ciudadanos”.
En lo que respecta a la opinión del PA, los andalucistas coinciden en muchos aspectos con los de los sindicatos. Añadiendo que ya no les resulta “chocante” la actitud del PSOE, “que se considera progresista, pero en cambio pone en marcha este tipo de medidas más cercanas a las políticas conservadoras de por ejemplo la Sr. Aguirre en Madrid”.
Así, los sindicatos pusieron en marcha el pliego de firmas que esta mañana entregarán al Equipo de Gobierno socialista presidido por el alcalde Antonio Gutiérrez Limones. El cual, ante las acusaciones de los representantes de los trabajadores y los de un sector de la oposición, aún no se ha pronunciado públicamente.
Los sindicatos, unidos frente a Limones
La lucha por frenar la privatización de la piscina de Los Alcores sólo es uno más de los frentes que los diferentes sindicatos alcalareños tienen abierto como medida de presión a la gestión de la alcaldía. Hay que recordar, que el pasado 22 de mayo tuvo lugar una Asamblea General, en el que participaron casi la mitad de los trabajadores del Ayuntamiento de Alcalá. En ella, se decidió iniciar un calendario de movilizaciones, uno de cuyos puntos era la entrega de las 2.000 firmas que hoy se realiza.
CCOO, UGT, CSI-CSIF, Sppme y el Sindicato Profesional de Bomberos (SPB), eran los sindicatos que acordaban las movilizaciones ante el incumplimiento, por parte de la alcaldía “de los acuerdos en materia de creación de empleo, las contrataciones temporales en fraude de ley, la falta de interés y dejadez por la organización interna del Ayuntamiento y la creciente privatización de servicios públicos municipales”.
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