Los trabajos, impulsados por Emasesa y ejecutados por la empresa Freyssinet, han contado con un presupuesto total de 574.658 euros y se han finalizado en un plazo de doce meses. Durante este tiempo, la obra fue cubierta por una lona para evitar molestias a los viandantes.
Sevilla Actualidad. Ayer, día 11 de marzo, tuvo lugar la inauguración del lienzo de arquería de los Caños de Carmona, situado en la avenida de Luís Montoto en su esquina con la calle Jiménez Aranda, que surtía de agua a la medina de Isbiliya desde el manantial de Santa Lucía en Alcalá de Guadaíra.
De este modo, el lienzo del acueducto almohade queda abierto a peatones y turistas tras un proceso de restauración impulsado por la Empresa Metropolitana de Aguas de Sevilla (Emasesa) y ejecutado por la empresa especializada Freyssinet.
Así, se ha llevado a cabo la rehabilitación de uno de los tres lienzos que sobrevivieron a la demolición del acueducto en 1912. Trabajos entre los que han comprendido la limpieza de la piedra, cimentación y sustentación de la construcción mediante una gran viga de acero ‘Corten’, además de una adecuada reurbanización de sus aledaños con bancos, iluminación artificial y barandas.
El consejero delegado de Emasesa, Manuel Marchena, acompañó a Alfredo Sánchez Monteseirín en la inauguración del monumento, y recordó que antes de la intervención, esta arquería «prácticamente no se sustentaba». De hecho, estaba apuntalada en un espacio que durante años se ha convertido «casi en un vertedero» pese al valor histórico y patrimonial del lienzo del acueducto.
Marchena celebró la «consolidación definitiva» del monumento gracias a una inversión que ha incluido una excavación arqueológica para rescatar los pilares de la construcción.
Cabe destacar las actuaciones que se plantearon llevar a cabo por parte de Emasesa como fueron la integración urbana del monumento, su estabilización, así como la consolidación y la restauración de las arcadas.
No obstante, el periodo de rehabilitación ha afectado a los comerciantes que han iniciado acciones para reclamar al Consistorio indemnizaciones por las pérdidas económicas ocasionadas de las obras. «Han impedido un acceso fluido a muchos de los negocios de las inmediaciones», con el consecuente descenso del número de clientes y robos en varias tiendas, según anunció Agustín Rodríguez, presidente de los comerciantes de Luís Montoto.