La Policía Nacional ha desarticulado en Sevilla una organización criminal dedicada al tráfico de drogas que utilizaba el río Guadalquivir como vía de entrada para sus cargamentos. La operación se ha saldado con seis detenidos, acusados de tráfico de estupefacientes, pertenencia a organización criminal y defraudación de fluido eléctrico.
La red contaba con una estructura logística que permitía recepcionar la mercancía procedente de la costa andaluza, almacenarla y distribuirla. Parte del material se destinaba al menudeo en distintos puntos de la ciudad, mientras que el resto se enviaba al extranjero mediante paquetes camuflados con nombres y direcciones de empresas reales. Este proceso lo gestionaba un matrimonio de la barriada del Aeropuerto Viejo, encargado de encubrir los envíos.
La investigación comenzó el pasado verano, cuando los agentes detectaron la existencia de una infraestructura consolidada para el almacenamiento, manipulación y distribución de droga. Las pesquisas permitieron comprobar que, además de los cargamentos llegados por vía fluvial, la banda adquiría marihuana de diversas plantaciones repartidas por la provincia.
En los registros practicados, la Policía intervino más de tres toneladas de hachís, además de 20 kilos de cogollos y plantas de marihuana, cocaína, varios vehículos de alta gama, una furgoneta usada para el transporte de la droga, un chaleco antibalas y una placa de la Guardia Civil. Todos los detenidos han sido puestos a disposición judicial junto al material incautado.
