La radiografía económica de los municipios sevillanos muestra una marcada brecha en los niveles de renta. Según los últimos datos de la Agencia Tributaria sobre renta bruta media, correspondientes a 2023 y publicados en 2025, Marinaleda se sitúa como el municipio más pobre de la provincia de Sevilla, con una renta media anual de 15.193 euros.

Este dato coloca a la localidad de la Sierra Sur en el último puesto del ranking provincial entre los municipios con más de 1.000 habitantes. Le siguen de cerca El Palmar de Troya, con 16.054 euros, y Badolatosa, con 16.125 euros de renta bruta media. Otros municipios que completan la lista de los más desfavorecidos en términos de ingresos son Isla Mayor, Algámitas, Martín de la Jara, Montellano, El Rubio, La Puebla de los Infantes y Pruna, todos ellos con rentas medias que oscilan entre los 16.500 y los 17.300 euros.

La brecha con respecto a los municipios más prósperos de Sevilla es notable. Localidades del Aljarafe como Tomares (38.953 euros), Espartinas (37.962) o Bormujos (34.766) superan ampliamente la media provincial, lo que evidencia el contraste económico existente entre áreas metropolitanas de Sevilla y pueblos de la Sierra Sur y la Sierra Norte.

Estos datos ponen de relieve las diferencias socioeconómicas en el territorio sevillano, donde factores como el peso del sector agrícola, la estructura laboral, el empleo público o la cercanía a la capital marcan las desigualdades de ingresos. Mientras las zonas más urbanizadas y vinculadas al área metropolitana concentran los niveles de renta más altos, los municipios rurales, en especial los de menor tamaño, continúan en la cola de la provincia.

La estadística no solo refleja una radiografía económica, sino que también apunta a los retos pendientes en materia de cohesión territorial y equilibrio social. La distancia entre los extremos de la tabla es de más de 23.000 euros de renta bruta media, lo que se traduce en diferentes realidades de bienestar y oportunidades para sus habitantes.

En este contexto, Marinaleda vuelve a aparecer en los últimos puestos del ranking, consolidando una tendencia que se repite en los informes de años anteriores. Una situación que reabre el debate sobre el desarrollo económico en los municipios de la Sierra Sur y los desafíos para revertir la desigualdad en la provincia de Sevilla.