José María Del Nido Carrasco abrió su comparecencia explicando el contexto en el que se ha desarrollado el mercado de fichajes. El presidente recordó que el club partía de una «situación deportiva negativa» tras una «muy mala temporada» y de un escenario económico marcado por «dos años sin entrar en Europa» y con menores ingresos televisivos.

A pesar de ello, defendió que se ha llevado a cabo un «mercado responsable» y se mostró «satisfecho» con el resultado. En cifras, detalló que la deuda neta actual se sitúa en 66 millones de euros y que el coste de la plantilla es de 85 millones, muy por debajo de los 203 millones de hace dos temporadas. «La realidad económica es que somos solventes», subrayó.

Movimientos de jugadores y operaciones

El dirigente agradeció de manera explícita a Djibril Sow, Marcao y Adnan Januzaj por aceptar modificaciones en sus contratos, lo que permitió inscribir a otros futbolistas. Explicó además que algunos jugadores, como Januzaj, continúan en el equipo no solo por ajustes salariales, sino por su «compromiso» y porque convencieron al cuerpo técnico durante la pretemporada.
Respecto a operaciones que no se concretaron, Del Nido Carrasco señaló directamente al Nápoles por el caso de Juanlu Sánchez: «El 12 de junio recibimos una oferta que consideramos insuficiente y desde entonces se habló de una presunta oferta que nunca llegó de manera válida».
También mencionó la salida de Lukebakio y la situación de Álvaro Fernández, recalcando que las decisiones finales dependieron de la visión del nuevo cuerpo técnico.

El caso Amrabat

Uno de los nombres propios en los últimos días del mercado fue el de Sofyan Amrabat, finalmente fichado por el Real Betis. Del Nido Carrasco explicó que el Sevilla estuvo trabajando en varias operaciones de salida y entrada, pero que no siempre se pueden controlar los tiempos ni la voluntad de todas las partes implicadas.
Aclaró además que con Kelechi Iheanacho se intentó llegar a un acuerdo de reducción salarial para poder inscribirlo, pero LaLiga lo rechazó. Esa circunstancia obligó al club a frenar algunas negociaciones y a centrarse en inscribir a los 25 jugadores con los que cerraron la plantilla. «Amrabat es jugador del Betis y no tengo nada que decir», concluyó.

Proyecto del nuevo estadio

Sobre el futuro del Ramón Sánchez-Pizjuán, el presidente confirmó que el Sevilla ya dispone de un anteproyecto para la remodelación y que los trámites administrativos están en marcha. Sin embargo, pidió paciencia al señalar que los plazos dependen de organismos públicos y que esas resoluciones retrasan más de lo que al club le gustaría.
«No podemos marcar un plazo de inicio porque dependemos de organismos públicos», insistió Del Nido Carrasco, recalcando que la entidad está comprometida con modernizar sus infraestructuras, aunque los tiempos no están únicamente en sus manos.

Proyecto deportivo y aspiraciones

Sobre los objetivos deportivos, evitó hablar de metas clasificatorias concretas: «Estamos muy ilusionados con la llegada de la dirección deportiva y con Matías Almeyda. No nos marcamos objetivos ni plazos. El objetivo es estar alegres por competir y por pelear».

Relación con la afición

En relación a los actos sociales y tradicionales, aclaró que su ausencia en Fieles de Nervión se debió a que «los protagonistas eran los Fieles» y que en la ofrenda a la Virgen de los Reyes el club decidió posponerla a septiembre por cuestiones de calendario, no de seguridad.
Del Nido Carrasco insistió en la importancia del papel de la afición: «Me gustaría que los jugadores del Sevilla se sintieran queridos y arropados por su afición, que sea más fácil ganar partidos en casa».

Acciones y situación personal

Preguntado por la posibilidad de vender sus acciones, Del Nido Carrasco fue tajante: «Fede Quintero es mi amigo de toda la vida y Antonio Lappi es mi amigo desde hace mucho tiempo. Si vendo mis acciones, con las que tengo, el cambio en el Sevilla sería mínimo». Con ello quiso dejar claro que, incluso en caso de una hipotética venta parcial, no se alteraría de forma significativa el control accionarial ni el rumbo del club.

También descartó su dimisión, recordando que el Consejo fue nombrado para seis años y que cuenta con respaldo. «Estoy centrado en la regeneración económica y deportiva del Sevilla», apuntó.
Del Nido Carrasco concluyó resaltando que el Sevilla ha reducido su deuda, rebajado el coste de la plantilla y actuado con responsabilidad en el mercado. Recalcó que el club es «solvente» y pidió el apoyo de la afición en esta nueva etapa, en la que el objetivo inmediato es recuperar la estabilidad deportiva y económica.

«El objetivo es estar alegres, competir y pelear», cerró su intervención.