El sacerdote Pedro Elena, natural de Lebrija (Sevilla) y de 32 años, continúa ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital de Valme desde el pasado lunes tras sufrir una parada cardíaca, cayendo fulminado al suelo, tras una comida en Lantejuela. Su delicado estado de salud ha generado una gran conmoción en la Archidiócesis de Sevilla y en las parroquias donde ha ejercido su ministerio.

Muy querido en Los Palacios y en Lantejuela, sus primeros destinos pastorales, el joven sacerdote ha sido reconocido siempre por su cercanía y entrega a los fieles. Próximamente iba a desarrollar su labor en Villaverde del Río.

Desde que se conoció la inesperada noticia, numerosas parroquias de la provincia y colectivos de fieles se han volcado en la oración por su recuperación. Se han organizado vigilias, grupos de rezo y cadenas de mensajes en redes sociales, reflejo del cariño que ha despertado en las comunidades por las que ha pasado.

La Archidiócesis de Sevilla ha pedido mantener la esperanza y acompañar con la oración a la familia del sacerdote Pedro Elena, que permanece junto a él a la espera de su evolución en los próximos días.