La Hermandad de la Macarena ha aprobado por amplia mayoría la propuesta de la Junta de Gobierno para que el conservador-restaurador Pedro Manzano acometa una nueva intervención en la Virgen de la Esperanza. La decisión se tomó durante el cabildo extraordinario celebrado este martes, que se prolongó hasta las 3:45 horas de la madrugada y congregó a más de 1800 hermanos.
La propuesta fue respaldada por 998 votos de los 1475 emitidos. Un total de 458 hermanos votaron en contra y 13 lo hicieron en blanco. La votación tuvo lugar tras la exposición del informe-diagnóstico sobre el estado de conservación de la talla, elaborado por el Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico (IAPH), y la explicación del plan de restauración por parte de Manzano.
La intervención tendrá un plazo estimado de tres meses, aunque podría prolongarse si durante el proceso se detectan nuevas patologías, según precisó el restaurador.
Durante el cabildo, el Hermano Mayor, José Antonio Fernández Cabrero, pidió nuevamente perdón a los hermanos por el daño espiritual y devocional que, según expresó, ocasionó la intervención anterior realizada por el equipo del profesor Arquillo. En su intervención, relató cronológicamente los hechos acaecidos antes, durante y después de aquella actuación, y detalló que el nuevo proceso contará con la supervisión del IAPH y la Consejería de Cultura.
El cabildo se desarrolló en un ambiente tenso, marcado por la polémica suscitada por la anterior intervención en la imagen. Aquella actuación fue duramente criticada por numerosos fieles, que denunciaron un “efecto estético no buscado” en el rostro de la Virgen. La respuesta social se tradujo en una multitudinaria concentración el pasado 23 de junio en los alrededores de la basílica, donde se exigieron responsabilidades e incluso dimisiones en la Junta de Gobierno —el teniente de hermano mayor, Dávila Miura, renunció días después—.