Alfonso González «Alfon» ya se dirige a la afición como jugador del Sevilla FC, y en su primera entrevista ha dejado muy claro su convicción: «Quien haya pensado que no quería venir está muy equivocado. He tenido muchas ofertas, pero aquí es donde quería estar. Cuando firmé lo hice cien por cien convencido». Procedente del Celta y tras varias cesiones, el albaceteño ha puesto en valor la convicción que le ha traído hasta Nervión.
Desde su aterrizaje, Alfon ha irradiado ilusión por el nuevo proyecto. Ha confesado que sus primeras horas en la ciudad deportiva han sido «muy intensas» y que se siente «muy feliz de estar aquí y con ganas de comenzar y de disfrutar». Esa ilusión es palpable en cada frase y en su deseo de ganarse a la afición desde el primer momento.
Primer posado de Alfon González con la equipación completa 🤤 ⚪️🔴 pic.twitter.com/ivTX7vjfTm
— Sevilla Fútbol Club (@SevillaFC) July 5, 2025
En cuanto a sus cualidades, Alfon se ha definido como un futbolista de desborde y verticalidad. Se describe a sí mismo como «un jugador al que le gusta mucho el uno para uno, encarar, pues soy rápido, y suelo buscar portería para hacer daño a los rivales». Ese desborde le convierte en una amenaza constante para las defensas, mientras que su verticalidad promete quebrar el ritmo rival y aportar frescura al ataque sevillista.
Relacionado con su proyección ofensiva, no duda en destacar su instinto de gol: «Me considero un jugador vertical que siempre va a por el gol». La palabra gol se convierte en un compromiso: quiere dejar su huella en el Sánchez-Pizjuán y dar alegrías a la hinchada.
Además de su juego, Alfon ha querido cerrar cualquier tipo de rumor respecto a su llegada. Ha sido contundente: «Quien haya pensado que no quería venir está muy equivocado», reafirmando su plena convicción.
Su trayectoria habla de sacrificio: «vengo del barro» tras pasar por Albacete, opciones en Segunda B, cesiones y finalmente el Celta. Llega al Sevilla FC en «su mejor momento, muy maduro, con ganas».
Alfon rememora con emoción su pasado en el Ramón Sánchez-Pizjuán, cuando pisó el campo como rival en la despedida de Jesús Navas y «se le pusieron los pelos de punta». Su ilusión por actuar algún día en ese escenario se funde con su promesa de gol y compromiso.
Para cerrar, envía un mensaje a la afición: «Vamos a pelear mucho, a sufrir mucho pero también a disfrutar mucho. Lo vamos a pasar bien y vamos a disfrutar en nuestro estadio». Veremos si Alfon es capaz de cumplir su palabra, y poder ayudar en Nervión para volver a llevarlo al lugar que merece.