El Sindicato Médico de Sevilla denuncia una nueva agresión a un médico de familia y su residente en el Centro de Salud Marqués de Paradas de Sevilla capital. Los hechos ocurrieron el pasado jueves 12 de junio, al inicio de su jornada laboral, que comenzaba a las 8:00 horas con la agenda habitual de citas.
Según el sindicato, el médico agredido se encontraba en consulta cuando un individuo irrumpió exigiendo un parte de baja para su pareja. El médico le explicó que, dado que no era una urgencia, atendería primero a los pacientes ya citados. Esta respuesta provocó «amenazas y exabruptos» por parte del individuo.
Pasado un tiempo, el médico «permitió el acceso al individuo, pidiéndole que explicara el problema y mostrara el informe de la atención previa de su mujer». En ese momento, el agresor «se abalanzó sobre la mesa de la consulta, insultando al médico y a la residente, quien, presa del pánico, se arrinconó». A pesar de los intentos de explicar la necesidad de explorar al paciente para emitir una baja, o de contar con un informe médico, el agresor «continuó vociferando, amenazando con los facultativos» tendrían que «acarrear con las consecuencias» si tenía que ir a su casa a buscar el informe. Llegó a cuestionar la valía y la formación de ambos médicos, amenazando con «hacer público el desastre que eran como médicos».
«No tenían ni idea de lo que es ser médico»
Compañeros de otras consultas, alertados por los golpes y las voces, acudieron en auxilio. En ese momento, el agresor abandonó la consulta con claras amenazas de regresar para conseguir la baja «quieran o no los médicos». A media mañana, el individuo regresó al centro, visiblemente alterado, gritando de nuevo e irrumpiendo en la consulta sin respetar a otros pacientes. Golpeó la mesa con una mano, esgrimiendo el informe solicitado, y volvió a amenazar a los facultativos, diciendo que «no tenían ni idea de lo que es ser médico».
Los dos profesionales agredidos tuvieron que ser asistidos de urgencia por sus compañeros debido a la crisis de ansiedad provocada por el incidente. A fecha de hoy, los médicos agredidos no han solicitado la baja laboral, aunque no descartan hacerlo debido al impacto psicológico del acto de violencia sufrido.
