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Durante la entrevista emitida en ‘Lo de Évole’, en la noche de ayer, la actriz María León contó lo que sucedió en Sevilla con los agentes de la Policía, por el que acabó detenida en una celda. «Era el fin de rodaje. Acabé a las siete de la tarde de rodar y fuimos a celebrarlo. El último era el cámara, que iba con la bici de uno de los directores y salió con una copa en la mano», relata la actriz.
«Le paran. Lo vemos de lejos. Luego aparece otro coche, y de repente llega una lechera. Cuando nos acercamos había mucha violencia en ese círculo. Mucha tensión. Empezaron a empujarnos y yo, que peso 50 kilos, caí y me asusté. No entendía nada. Cogí el móvil y empecé a grabar», cuenta la actriz. Ante la supuesta escena de violencia policial, la actriz añadió: «¿Por qué nos estáis haciendo esto? Deberíais protegernos, no violentarnos. No entendí su respuesta. Me salió con la cultura. Refiriéndose a que éramos actores».
«No sé lo que vieron, pero se tiraron tres personas encima de mí», narra. «Se abre la puerta del coche. Me bajo con una angustia para coger aire y se escucha que huya. Fui hacia los agentes buscando ayuda porque tenía un ataque de ansiedad. No sé qué es lo que vieron», expresa la actriz durante su relato. Ante eso, la actriz preguntó por qué estaban haciendo eso. «Porque sí», afirma que fue la respuesta que le dieron los agentes allí presentes. «Me llevan a comisaría, y pasó el tiempo suficiente para que me agotase y dejara de llorar», prosigue.
«Era muy denigrante»
«Me quedé sentada en esa celda y pasó no sé cuánto tiempo. Me quedaba dormida, y al despertar me había bajado la regla del sofocón. Llamé y se lo dije a una chica, pero no me dejaron asearme. No me dieron nada. Era muy denigrante», expresa.
María León también le confesó a Évole cómo fue su salida del lugar: «Un señor hablándome, que era el abogado que mi hermano Alejandro había conseguido. Me dijo que me pusiera unas gafas. No lo entendí. Quería ir al baño y limpiarme. Nada más salir, la prensa estaba en la puerta. Estaba en el calabozo y la noticia ya estaba fuera».