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La calle Méndez Núñez, que conecta la Plaza Nueva con el entorno de la Magdalena, comenzará al inicio del verano su transformación completa. En estas obras se invertirán más de 1,4 millones de euros, incorporando un plan de reurbanización integral que modificará su estética actual. Por ello, la reforma provocará el cierre total al tráfico de vehículos durante siete meses, sólo permitiendo el acceso de peatones residentes o clientes de los comercios. En este sentido se prevé un itinerario alternativo para el resto de viandantes.
Esta intervención en la calle Méndez Núñez se llevará a cabo en dos fases; la primera afectará al tramo comprendido entre la Plaza Nueva y la calle Moratín, en el que se estima un plazo de ejecución de 18 semanas; la segunda comprenderá entre la calle Moratín y la Plaza de la Magdalena, en un plazo estimado de 10 semanas. En esta última fase, también se actuará sobre los acerados de la calle San Pablo. El plazo para la presentación de ofertas a la licitación concluye el martes 8 de abril. A partir de ahí, las empresas tendrán que concretar sus propuestas, iniciando los trabajos a principio del mes de junio. De este modo, la obra estaría finalizada al completo en enero del próximo año 2026.
El motivo principal de esta actuación es la renovación integral de las redes de Emasesa, afectadas por el paso del tiempo. Debido a las obras de renovación, las calles perpendiculares como Albareda, Carlos Cañal, Rosario, Moratín o Muñoz Olivé, también podrán sufrir cortes de tráfico. En este sentido, la principal novedad vendrá con la implantación de la plataforma única y el adoquín de Gerena en la parte central de la calzada.