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La Audiencia de Sevilla celebrará un juicio el día 25 contra un varón por atracar supuestamente un hotel a punta de pistola y robar más de 2000 euros encañonando a la recepcionista, amenazada con «volarle la cabeza» de un disparo. Se le reclama siete años de cárcel por un presunto delito de robo con intimidación.
Según la Fiscalía, el acusado «accedió al interior del hotel Sevilla Congresos» junto con otra persona no identificada «por la zona de la piscina, saltando la valla perimetral, con evidente ánimo de obtener un inmediato e ilícito beneficio patrimonial». Según el Ministerio Público, lo hizo «ocultando su rostro con una capucha sobre la cabeza, cubierta con una gorra con visera y una braga de cuello». Una vez dentro del hotel, se dirigió al vestíbulo del establecimiento, donde se encontraba la recepcionista. Seguidamente, la «encañonó con un arma de fuego corta al tiempo que le decía levantado la voz» que no gritase y que les diese el dinero, presuntamente.
Según la Fiscalía, la recepcionista, «atemorizada, indicó al acusado y a su acompañante el cajón donde se guardaba el dinero en efectivo, de donde se llevaron 2016,38 euros. Tras esto, exigieron que les indicara dónde estaba la otra caja y les entregara su terminal móvil», si bien la trabajadora les respondió que «no había otra caja» y que ella no llevaba ningún teléfono móvil consigo. Tras ello, presuntamente, «el acusado le ordenó que se arrodillara» con la advertencia de que si no lo hacía, «le volaba la cabeza».
Siete años de cárcel
«Una vez arrodillada, el acusado, junto con el individuo que le acompañaba, abandonaron el hotel por la puerta principal», precisa la Fiscalía, agregando que la compañía aseguradora indemnizó al hotel por el dinero sustraído en la cantidad de 900 euros, merced a la póliza suscrita entre ambas partes.
La Fiscalía detalla además que sobre el acusado pesan cuatro sentencias firmes condenatorias por delitos de robo con fuerza o robo con violencia e intimidación. Además, se le reclama siete años de cárcel por un nuevo delito de robo con intimidación en local abierto al público, con las agravantes de uso de disfraz y de «multireincidencia». El inculpado por presunto robo en un hotel se encuentra actualmente en prisión provisional sin fianza, a espera del juicio.