La Lotería de Navidad, una de las tradiciones más arraigadas en España, no solo despierta ilusiones y esperanza, sino también genera historias entrañables que quedan grabadas en la memoria colectiva. En Sevilla, esta tradición ha dado lugar a curiosidades y anécdotas que reflejan el carácter especial de la ciudad y sus habitantes.
Un acto de honestidad
Este mes de diciembre, seis estudiantes de secundaria del Instituto Fernando Herrera se convirtieron en protagonistas de una historia que muchos calificaron como un «milagro de Navidad». Los jóvenes encontraron un sobre que contenía 3000 euros y varios décimos de la Lotería de Navidad. En lugar de apropiarse del hallazgo, decidieron contactar con el 112, lo que permitió a la Policía localizar a los dueños del dinero: la Hermandad de la Veracruz de La Campana. Como muestra de agradecimiento, la hermandad obsequió a cada estudiante con un décimo, recordando que los valores de honestidad y solidaridad son el mejor premio.
Una ciudad afortunada
Sevilla tiene un historial destacable en la historia de la Lotería de Navidad. La ciudad ha sido agraciada con «El Gordo» en 19 ocasiones, lo que la sitúa entre las más afortunadas de España, solo por detrás de Madrid y Barcelona. Esta estadística no solo atrae la atención de los sevillanos, sino también de visitantes de otras regiones que ven en la capital andaluza un lugar lleno de buena fortuna.
Supersticiones y rituales
La compra de décimos también está rodeada de supersticiones y rituales. En Sevilla, algunas administraciones de lotería se han convertido en verdaderos santuarios de la suerte. Una de las más populares es «El Gato Negro», donde los compradores suelen frotar los décimos contra fotos familiares o imágenes religiosas antes de adquirirlos. Además, no faltan quienes creen que entrar a la administración con el pie izquierdo o recibir el décimo con la mano derecha asegura la buena fortuna.
Encuentros inesperados
Una anécdota singular tuvo lugar en diciembre de este año, cuando el actor y cómico senegalés Lamine Thior compartió en redes sociales una curiosa experiencia vivida en Sevilla. Durante un paseo por la ciudad, una mujer senegalesa le pidió ayuda con unas bolsas. Tras una breve conversación, descubrieron que compartían lazos familiares inesperados. En tono jocoso, Thior comentó: «Increíble, compra lotería porque te va a tocar». Este encuentro fortuito, cargado de coincidencias, se viralizó y reforzó la magia que envuelve estas fechas.
Un símbolo de esperanza
La Lotería de Navidad no solo es un sorteo, sino un reflejo de las emociones y valores que unen a las personas. En Sevilla, las anécdotas y curiosidades asociadas a este evento recuerdan que más allá de los premios, lo importante es compartir la alegría, la esperanza y las pequeñas historias que hacen de esta tradición algo único.
En cada administración de lotería, en cada cola para comprar un décimo, Sevilla demuestra que la magia de la Navidad también se encuentra en los gestos, las casualidades y los sueños compartidos.