Los roscos fritos son un plato idóneo para Navidad, tanto en postres como en meriendas y desayunos. Su receta tradicional es especialmente conocida en Semana Santa en varios puntos de la geografía andaluza.
Es común que este dulce de origen árabe contenga ralladuras de limón. Sin embargo, también es interesante darle un giro original añadiendo naranja, tanto en este formato como en zumo.
En primer lugar, estos son los ingredientes necesarios para esta receta:
- Cuatro huevos
- Un vaso de azúcar (250 gramos)
- Un vaso de aceite de oliva suave (250 mililitros)
- Un vaso de zumo de naranja (250 mililitros)
- Ralladura de una naranja
- Un kilo de harina de trigo (aproximadamente)
- Un sobre de levadura en polvo (16 gramos)
- Aceite de oliva para freír
- Azúcar y canela para espolvorear
La original receta de roscos fritos que podrás usar en Navidad y Semana Santa
- En un bol grande, batir los huevos con el azúcar hasta que la mezcla esté homogénea y tenga un color más claro.
- Agregar aceite de oliva y el zumo de naranja. Mezclar con mucho cuidado para que se integren bien.
- Incorporar la ralladura de naranja y mezclar nuevamente.
- Tamizar la harina y la levadura en polvo sobre la mezcla húmeda. Añadir aproximadamente 800 gramos de harina y mezcla.
- Continuar agregando harina gradualmente hasta obtener una masa que se pueda manipular. La cantidad total de harina puede variar, así que se recomienda añadir poco a poco.
- Amasar la masa en una superficie enharinada hasta que esté suave y no se pegue a las manos.
- Formar pequeños discos con la masa, haciendo un agujero en el centro para dar forma a los roscos.
- Calentar suficiente aceite en una sartén grande para freír los roscos.
- Freír los roscos en lotes hasta que estén dorados por ambos lados. Es muy importante que estén bien cocinados en el centro.
- Retirar los roscos fritos, colocándolos sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
- Mezclar azúcar y canela en un plato y pasar cada rosco por la mezcla mientras aún estén calientes.
Tras terminar, se pueden acompañar estos roscos con un sinfín de bebidas, tanto calientes como frías, para desayunar, merendar o incluso como postre.