La Hermandad de la Estrella acoge desde ayer el besapiés a la imagen de Nuestro Padre Jesús de las Penas. Durante el fin de semana los devotos acuden a la capilla situada en la calle de San Jacinto con el fin de besar los piés de esta popular imagen.
José Mª Lugardo. Es tiempo de Cuaresma. En Triana el olor a incienso propio de estos días reclama la atención de cuantos, aún ajenos a la actividad de las hermandades, pasean por la calle de San Jacinto.
Durante este primer fin de semana de marzo la capilla de la Hermandad de la Estrella permanece abierta en el barrio de Triana. Acoge el solemne besapiés de su titular, Nuestro Padre Jesús de las Penas, que preside el altar mayor y se presenta ante los sevillanos a los pies de la Cruz, entre velas, flanqueado por dos faroles y un exhorto floral de color rojo. Como siempre en posición orante, mirando al cielo, con la novedad de una corona de espinas colocada sobre su cabeza.
Con motivo de este culto, y tras el quinario oficiado del 23 al 27 de febrero, la capilla ha sido dispuesta para la ocasión, situando a María Santísima de la Estrella en el segundo altar.
El besapiés finalizará esta tarde a las 20:30 horas para después celebrar un Vía-Crucis dentro de la capilla trianera presidido por el director espiritual de la hermandad, Juan Dobado, con el acompañamiento musical del coro de La Estrella. No obstante los cultos previos a la Semana Santa continuarán el próximo fin de semana, cuando la imagen de la Virgen de la Estrella permanecerá expuesta en devoto besamanos hasta la celebración el domingo de la misa de Hermandad.