A falta de confirmación matemática, el Betis seguirá la próxima temporada en primera división. La victoria ante el Osasuna deja a los de Pepe Mel mucho más cerca de puestos europeos.
Decía José Luis Mendilíbar, técnico del Osasuna, que el Betis decía jugar muy bien pero tenía 39 puntos por 46 del equipo navarro. Cierto, y esta tarde ha sufrido en primera persona algo que muchos de sus contrincantes han experimentado a lo largo de la temporada, esto es, perder sin haber sido peor que el rival.
El Betis dio un baño de juego al Osasuna en el partido de ida y perdió. Hoy, los de Pepe Mel no han jugado bien pero han ganado. Tenía, pues, razón Mendilíbar, que jugando mal se puede ganar. Y hoy le ha tocado perder, además gracias a un gol del perdonado Rubén Castro…
El partido empezó sin dueño. El Betis tenía más la pelota pero sin peligro y el Osasuna sólo se acercaba a balón parado, colgando balones al área que apenas inquietaron a Fabricio. Media hora para olvidar hasta que Rubén Castro, tenía que ser él, lanzó un magnífico latigazo que se coló junto al palo poniendo por delante al Betis. Poco más que contar hasta el descanso.
La segunda mitad comenzó con el mismo guión, el Betis lanzaba peligrosos contragolpes y el Osasuna se entregaba a los balones parados para intentar empatar. El partido enloqueció a falta de media hora para la conclusión. La tarjeta roja directa a Raúl García por una dura entrada a Jefferson Montero tendría que haber servido para finiquitar el encuentro pero no fue así.
El Betis volvió a demostrar que no sabe cerrar los partidos, falló lo infallable y volvió a dar vida a un rival que minutos antes parecía acabado. Jorge Molina tuvo el segundo en un mano a mano ante Andrés Fernández, pero se adelantó mucho el balón y permitió al buen portero murciano salvar la ocasión de peligro.
El despropósito bético permitió a Osasuna acercarse con peligro al área de Fabricio y el árbitro obvió dos posibles penaltis -por posible empujón de Nelson y más que posible falta de Iriney a Ibrahima- y el marcador no se movió. 1-0 y el Betis a falta de confirmación matemática, permanecerá la próxima temporada en primera división.
Rubén Castro hizo su décimo cuarto gol. El delantero canario vio la quinta tarjeta amarilla en Anoeta y los comités, por una vez y sin que sirva de precedente, impartieron justicia dejando sin efecto la amonestación de Mateu Lahoz y el menudo delantero lo aprovechó dando la victoria a su equipo con un excelente gol desde fuera del área.
El próximo domingo los de Pepe Mel se enfrentarán al Valencia de Unai Emery con la tranquilidad del objetivo cumplido, algo que puede hacer al Betis más peligroso aún. Siempre que ha jugado sin presión -recordemos las cuatro primeras jornadas de liga- se ha visto la mejor versión del conjunto bético y no hay que olvidar que en los cinco enfrentamientos que quedan antes de terminar la liga -Valencia, Atlético de Madrid, Sevilla, Sporting de Gijón y F.C. Barcelona, el Betis sumó diez puntos de los quince en juego en la primera vuelta, con tres victorias, un empate y sólo una derrota ante el actual campeón de Europa.
Real Betis Balompié: Fabricio, Nelson, Paulao, Dorado, Nacho, Beñat, Iriney, Jonathan Pereira (Juanma, minuto 64), Jefferson Montero (Matilla, minuto 80), Roque Santa Cruz (Jorge Molina, minuto 77) y Rubén Castro.
C.A. Osasuna: Andrés Fernández, Damià, Flaño, Lolo, Echaide (Lekic, minuto 83), Puñal, Raoul Loé, Álvaro Cejudo (Timor, minuto 69), Raúl García, Lamah (Ibrahima, 64) y Nino.
Gol: 1-0, minuto 33, Rubén Castro.
Árbitro: Miguel Ángel Ayza Gámez (comité valenciano). Expulsó con tarjeta roja directa a Raúl García. Amonestó al local Paulao y a los visitantes Raoul Loé y Lolo.
Asistencia: 35650 espectadores.
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