En su columna de esta semana, el autor reflexiona sobre la noticia del alto el fuego general y permanente de ETA.
Lo cierto es que son muchos años,
muchas noticias, muchas banderas
cubriendo la madera
de los que no agacharon la cabeza.
Lo cierto es que tuvieron (cómo no)
que venir los “gabachos”,
a plantarles cara,
a aplastar sus fronteras.
Lo cierto es que hay
demasiadas cosas
que no van a volver,
por más que quieran ser.
Lo cierto es que al menos,
han colgado las balas,
y toda España adormece
el miedo cada mañana.