La empresa asegura que se mantiene una comunicación fluida con el Ayuntamiento de Sevilla y se tiene conciencia de la voluntad porque todo siga adelante.
La multinacional sueca Ikea reconoció ayer la existencia de «retrasos» en la ratificación del convenio urbanístico por parte del pleno del Ayuntamiento de Sevilla sobre el que versa la construcción de una segunda tienda en la provincia. Este segundo proyecto de Ikea supondría una inversión de 200 millones de euros, así como la generación de 2.000 puestos de trabajo y otros 8.000 más procedentes de la construcción de esta tienda.
Según fuentes de Ikea dicho convenio «se tenía que haber ratificado en pleno en diciembre, pero no se hizo entonces, no sabemos por qué ni tenemos constancia de los motivos por los que no se ha llevado a pleno». No obstante, se ha mostrado «convencido» de que «en próximos días se darán los pasos necesarios para ratificar ese convenio urbanístico y poder empezar el proyecto». A su vez, agregaron que les consta “voluntad de que este proyecto se materialice” desde el Ayuntamiento.
Por su parte, el gerente de Urbanismo, Miguel Ángel Millán, aseguró que el Ayuntamiento el pasado 20 de diciembre ya fue aprobada la modificación del PGOU para facilitar la apertura de más centros comerciales en los nuevos suelos de expansión de la ciudad, concretamente en San Nicolás Oeste, donde la multinacional negocia la apertura. A este sentido, apuntó que si bien dicho cambio otorgó la legalidad necesaria, esta “no es suficiente y hay que seguir dando pasos”.
En la misma línea, Millán señaló que frente a los 150.000 metros cuadrados necesarios para la edificación, la parcela sólo dispone de 103.000 metros, “por lo que requiere una nueva modificación puntual del PGOU que inevitablemente requiere el consenso previo de todas las Administraciones”.