Los agentes se vestían de uniforme tras salir de su turno y cobraban por el servicio

Los agentes, presuntamente, se vestían de uniforme una vez que habían terminado su turno y se dedicaban a hacer trabajos propios del cuerpo cobrando a las empresas. Justicia ya ha incautado varios ordenadores para examinar su contenido y han declarado 30 policías.

 

El juzgado de Instrucción número 8 de Sevilla lleva a cabo una investigación en el seno de la Policía Local por un presunto delito de cobro de tasas ilegales llevado a cabo por algunos agentes de la unidad motorista de tráfico.

La investigación se inició en septiembre de 2009 cuando, según recoge El Correo de Andalucía, un agente de la Policía Local fue detenido en una investigación realizada contra el tráfico de drogas. A esta persona se le intervinieron conversaciones, se le registró la taquilla y se analizaron sus pertenencias, momento en el que se encontraron pruebas de irregularidades cometidas durante el servicio. Así lo expone el citado diario.

Los agentes, presuntamente, se colocaban el uniforme después de haber terminado su turno de trabajo y realizaban actividades propias del cuerpo, cobrando a las empresas donde las ejecutaban.

Ante esta situación, el pasado mes de noviembre, una investigación interna llevó a requisar seis ordenadores de la Jefatura de la Policía Local para examinar su contenido y más de 30 agentes han acudido a declarar por haberse hecho quedado presuntamente con la recaudación correspondiente a tasas de servicios especiales.

Esta presunta trama de cobro ilegal de tasas ha desencadeno argumentos por parte de los partidos políticos. El alcalde de Sevilla, Alfredo Sánchez Monteseirín, ha defendido la “profesionalidad” de la Policía Local hispalense y ha ceñido a “individuos concretos” los hechos. Además, ha explicado que cuando el Ayuntamiento tuvo conocimiento de los hechos, se modificó “completamente” el sistema de cobro de tasas.

Según consta en elcorreoweb.es, tales tasas se conciben como un dinero que pagan las empresas por los servicios que presta el Ayuntamiento y se calcula en función del número de agentes que acuden a escoltar al vehículo o a desviar el tráfico. Tal es así, que según ordenanzas municipales, la presencia de un agente puede costar alrededor de 20 euros, mientras que la de un coche patrulla o una moto puede aumentar hasta en 80 euros el servicio.

Actuación “implacable” ante “garbanzos negros”

La portavoz del gobierno en el Ayuntamiento de Sevilla, Nieves Hernández, ha asegurado que actuarán “implacablemente en la existencia de garbanzos negros” dentro de la Policía Local. Hernández también ha destacado la labor de los agentes, “un ejemplo de profesionalidad” y dice que si afloran más “garbanzos negros” el Consistorio tomará medidas.

Por eso, la portavoz ha expresado que, en caso de que aparecieran perjuicios económicos, tal y como señala El Correo de Andalucía, la administración local será “la primera en reclamar”

El Sindicato de Policías critica los hechos

La central del Sindicato Profesional de Policías Municipales de España (Sppme) en el Ayuntamiento de Sevilla ha criticado los actos que se cometieron en el seno de la Policía Local hispalense. Ha abogado por “que cada palo aguante su vela”, en el caso de que se demuestren irregularidades en el caso de trama de cobro ilegal de tasas.

El presidente de la sección del Sppme en el Consistorio, Manuel Bustelo, también ha expresado que no hay que generalizar, pues “se están investigando a determinados policías y no a toda la unidad”, por lo que piensa que se puede caer en el riesgo de “judicializar” a una unidad entera de policías, “que tiene más de 100 efectivos”.

Bustelo ha explicado que el cobro de estas tasas se hace por medio de papel de pago facilitado por el Ayuntamiento y que sirve como justificante, por lo que se ha preguntado «cómo es que nadie en el Consistorio se ha extrañado y no ha echado en falta todo este dinero».

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