Varios de los vecinos del barrio sevillano de El Pumarejo han decidido «hacer guardias» por la zona para evitar que el Ayuntamiento siga podando y talando los árboles de este barrio. La delegación de Parques y Jardines ha talado esta semana cuatro olmos de esta plaza del barrio de la Macarena provocando las críticas de varios colectivos ciudadanos que han denunciado el «arboricidio» sin criterio llevado a cabo por el Consistorio hispalense que, además, «acaba con la sombra y el frescor» de El Pumarejo, según han señalado a Sevilla Actualidad. Después de los trabajos de los operarios municipales en esta plaza tan sólo quedan tres olmos.
Los informes o expedientes realizados por los técnicos de Parques y Jardines que han originado la autorización del alcalde para el apeo de los cuatro olmos de El Pumarejo, a los que ha tenido acceso esta publicación, señalan lesiones graves en los ejemplares, tales como «pudrición y oquedades de consideración» en su estructura primaria, «fallos estructurales», así como un «estado fisiológico decrépito» lo que provoca «riesgo de caídas» sobre la zona peatonal y de restauración de la zona. El Ayuntamiento, a su vez, señala que «no hay ningún apeo más previsto ni programado» en El Pumarejo.
Bajo el lema de #SalvemosLosArbolesdeSevilla, #MasArboles o #PorElClimaDeSevilla, decenas de vecinos de la zona se han concentrado en la mañana de este miércoles (de 07.00 a 11.00 horas) frente a la Casa Palacio de El Pumarejo con sombrillas y carteles en protesta por las talas y podas indistriminadas que, a su juicio, está llevando a cabo el Ayuntamiento en toda la ciudad. Señalan que el «pretexto de seguridad» del Ayuntamiento para realizar estas talas no sirve, ya que se «están matando árboles en buen estado y sin un plan de reposición que luche eficazmente contra el calor y déficit de sombra verde».
La concentración de esta mañana sucede a otra de características similares protagonizada en esta misma zona de la ciudad este martes después de que el Ayuntamiento haya iniciado una campaña con el objetivo de apear todos los árboles de la ciudad que están en situación de riesgo extremo (grado cuatro) y que pueden resultar un peligro por riesgo de derrumbe. Con esta campaña se pretende acabar con los cerca de 500 árboles considerados “en situación de riesgo cuatro” por su estado de deterioro, al objeto de que estos ejemplares sean sustituidos por otros nuevos y sanos que no comporten peligro de desplome o de caída de ramas. Además, el Ayuntamiento tiene prevista la poda de otros 1.500 ejemplares.
- Plaza Pumarejo / SA
Ecologistas en Acción y La Revuelta condena el «arboricidio»
Las asociaciones Ecologistas en Acción y La Revuelta han apoyado la concentración vecinal del Pumarejo, criticando la «tala masiva» que señalan «contraviene lo dispuesto en la ordenanza municipal sobre arbolado en todos sus elementos esenciales». Ambos colectivos han solicitado al Ayuntamiento que «se escuche a colectivos y personas expertas y se rediseñe la política hacia el arbolado».
Ecologistas ha manifestado que «la principal causa de que muchos árboles de la ciudad estén débiles o enfermos es la inadecuada selvicultura, principalmente las podas». Por esta misma razón, esta agrupación ha solicitado también al Ayuntamiento una reunión «urgente» para que se explique a los vecinos el por qué del apeo del arbolado sevillano.
Ambas agrupaciones han señalado que la falta de cuidados del arbolado de la ciudad durante años ha conducido a que el Ayuntamiento tome la medida de «cortar por lo sano», «maximizando», como consecuencia, «los beneficios de las subcontratas encargadas del mantenimiento arbóreo y no el interés general de la ciudadanía».
Estimada María, esta situación no es una novedad. Las lesiones graves de las que hablan los informes son sencillamente falsas, un corta-pega de otros informes que descuidan incluso la ubicación de los ejemplares (que sepamos en la Plza. Pumarejo no existen parques infantiles). Esta información está accesible a destiempo en la pág. web del Ayto. y en la mayoría de las ocasiones responde a unos criterios que no justifican en ningún caso el tratamiento del verde urbano y los espacios públicos en la ciudad. Existen multitud de tecnologias punteras que muchos de los técnicos municipales conocen, gracias a los congresos y jornadas que se organizan, para evitar estas situaciones. Herramientas muy útiles para inspeccionar el estado de los árboles y que permitirian fiscalizar mejor la labor de las empresas adjudicatarias de los macrocontratos. Si llegamos a las mismas situaciones una y otra vez, es porque la gestión del arbolado urbano no es adecuada y termina en talas masivas, precisamente en verano, como viene ocurriendo habitualmente en los barrios. Los árboles no son farolas que se estropean y se reponen. Son seres vivos que realizan funciones esenciales, sobre todo en las ciudades: limpiar el aire que respiramos y aclimatar las calles, entre otras. Si el único criterio que se usa para su permanencia es el riesgo de desplome, las podas y las labores de silvicultura deberían inspeccionarse para que simplemente se realizaran adecuadamente respetando las cláusulas de los pliegos con los que se externalizan y contratan estos servicios a terceros.