Un conductor de VTC ha denunciado un apedreo a su vehículo después de dejar a un cliente en San Bernardo durante la Feria de Abril.

El conductor de un vehículo de transporte concertado (VTC) ha denunciado ante la Policía Nacional que el pasado 17 de abril, Feria de Abril, su coche fue apedreado por un supuesto grupo de «taxistas». En la denuncia el conductor expone que el apedreo del vehículo se produjo en la calle Santo Rey, en el barrio de San Bernardo, tras dejar a un cliente. 

Repentinamente, según la denuncia, «varios trabajadores de una empresa de taxis de Sevilla» irrumpieron en la vía pública lanzando «varias piedras contra la luna delantera del vehículo, que iba en circulación, consiguiendo detener» el mismo. Los supuestos atacantes, siempre según la denuncia, se habrían abalanzado sobre el vehículo y habrían llegado a intentar «abrir las puertas» del mismo, si bien el conductor emprendió la «huida» dando marcha atrás.

La situación se encuadraría así en el conflicto que enfrenta al sector local del taxi con los conductores de vehículos de transporte concertado que trabajan en Sevilla para empresas de alquiler de coches con chófer como Cabify.

Y es que los taxistas acusan a los conductores de VTC de incurrir constantemente en situaciones de «intrusismo» o competencia desleal, pues la regulación de los VTC es diferente a la de los taxis y les prohíbe captar clientes en la vía pública, por ejemplo. La Unión Nacional de Autoturismos (Unauto), que agrupa al sector de los VTC, ha llegado no obstante a exponer a la propia fiscal jefe de Sevilla, María José Segarra, la «insostenible situación de violencia» sufrida por los conductores que ejercen esta actividad en Sevilla para empresas como Cabify.

La situación, recordémoslo, tocó techo la madrugada del martes de la Feria de Abril de 2017. Aquella noche resultaron incendiados nueve turismos VTC desplazados de Madrid a Sevilla para reforzar los servicios de la empresa Cabify con motivo de la Feria, en un alojamiento rural de Castilblanco de los Arroyos donde descansaban sus conductores.

En ese contexto, una investigación policial relativa a los citados y supuestos casos de acoso, violencia y amenazas de taxistas a conductores de VTC llegaba a sumar un total de 32 taxistas investigados por su presunta relación con tales hechos, toda vez que las asociaciones sevillanas del taxi se desligan rotundamente de estas situaciones de violencia o coacciones.

Fruto de dichas pesquisas policiales, el Juzgado de Instrucción número ocho de Sevilla mantiene unas diligencias, en las que figuran como investigados los principales dirigentes de Solidaridad Hispalense del Taxi, entre ellos Enrique Filgueras y otros miembros del organigrama de dicha organización como Antonio Velarde o Francisco Ternero.