Juzgados de Sevilla
Audiencia Provincial de Sevilla / SA

El Juzgado de lo Penal número 9 de Sevilla ha condenado a un gorrilla, nacido en Portugal en 1973, a una pena de dos años de prisión por un delito de robo con violencia tras robar con unas tijeras a un varón cuando salía de su vehículo en las inmediaciones del Tanatorio de la SE-30 de la capital hispalense.

Fuentes del caso han informado a agencias de que el titular del Juzgado de lo Penal número 9 de Sevilla ha condenado al aparcacoche ilegal a dos años de prisión, pena que queda en suspensión a condición de permanecer tres años sin cometer delito. El ahora condenado ha quedado en libertad este lunes después de estar en prisión preventiva desde el día 29 de enero de este año.

La Fiscalía, según han señalado las citadas fuentes, solicitaba para el acusado cuatro años de prisión, si bien en el juicio, celebrado este lunes, las partes han alcanzado un acuerdo, por lo que el gorrilla ha aceptado dos años y el juez ha suspendido la pena, con la condición de que no vuelva a cometer un delito en los próximos tres años.

Los hechos, según la Fiscalía, sucedieron a las 14,30 del pasado 22 de enero cuando el acusado, «con la intención de obtener lo que pudiera», se acercó a la víctima cuando éste salía de aparcar su coche en las inmediaciones del tanatorio. El condenado, «esgrimiendo unas tijeras de grandes dimensiones que le colocó en la cintura», le quitó las llaves del vehículo y «a gritos le exigía la cartera y el móvil», que la víctima le entregó «presa de miedo dado que el acusado no cesaba de hacer amago de pincharle con la tijera».

Tras esto, el agredido se refugió en un vehículo que pasaba por el lugar, que lo llevó hasta el tanatorio, donde llamó a la Policía. El acusado, mientras tanto, intentó huir con el coche de la víctima, sin conseguirlo al evitarlo «vecinos y familiares» del denunciante. No obstante, huyó en bicicleta con los efectos de la víctima, que posteriormente los recuperó a través de «un individuo desconocido» previa entrega por el acusado, que carece de antecedentes penales computables.