El Pleno aprueba la moción socialista para restaurar y divulgar los restos arquoeológicos de la Casa Hermandad de la Hiniesta.

El Ayuntamiento de Sevilla, a través del acuerdo del Pleno Municipal propuesto por la moción del Grupo Municipal Socialista, ha aprobado el impulso del proyecto de restauración y puesta en valor de los restos arqueológicos localizados en la Casa Hermandad de la Hiniesta a través de la concreción de un apoyo económico de tal forma que la intervención suponga la puesta en valor y conocimiento de este patrimonio en beneficio del barrio de San Julián y de la ciudad.

Esta colaboración se materializará a través de un convenio que se desarrollará con la con la intención de  concretar el tipo de intervención, la restauración de los restos que garantice su conservación adecuada, así como las posibilidades de adecuar el espacio para su visita al público de forma diferenciada al uso de la casa hermandad a partir de un estudio trasladado por la propia Hermandad de la Hiniesta a través de una propuesta de actuación diseñada con el asesoramiento de la Delegación Territorial de la Consejería de Cultura y de la Universidad de Sevilla.

Los restos más antiguos de estas excavaciones se remontan a la etapa tardorromana, concretamente al siglo VI, aunque no conforman estructuras de edificios, por lo que su importancia es limitada. Los descubrimientos más interesantes corresponden al periodo islámico (siglos VIII–XIII), pudiéndose atribuir a dos periodos diferentes: el clásico islámico y el periodo almohade. Del primero de los periodos referidos son los más importantes, y destaca el hallazgo de una cisterna policromada en almagra roja que surtía a una fuente posterior y fechada en el siglo IX.

Esta cisterna estaba situada en unos jardines emplazados en una zona más baja que la habitada, de acuerdo con la tradición musulmana. Lo más característico e interesante de la misma es el mural pintado que la decora, con motivos geométricos y vegetales de una calidad extraordinaria. Estos restos hacen pensar que se trata de un palacio único entre los hallazgos arqueológicos encontrados en Sevilla.

Con posterioridad, en los siglos XII y XIII estas estructuras arquitectónicas fueron sustituidas por otras nuevas. En el siglo XIV, se levantó la parroquia y el solar se destinó a huertos e instalaciones hidráulicas complementarios a los mismos. Estos usos perduraron hasta el siglo XVIII, época de la cimentación encontrada de un nuevo edificio. A principios del siglo XIX se construyó la casa de vecinos que se derribó en 1968 para que el solar sirviera de patio de recreo de la Escuela de Formación Profesional Virgen de la Hiniesta. En la actualidad, ese patio ha sido incorporado con una nueva construcción a la casa hermandad, habilitándose un sótano para la conservación in situ y la visita de los restos arqueológicos.

El inmueble tiene el máximo nivel de protección contemplado en el Ayuntamiento de Sevilla, ‘A protección integral’. En la planta sótano, se dispone de un gran espacio diáfano que sirve para almacenar diversos enseres de Priostía, Diputaciones y de la Hermandad, y es aquí donde se conservan los restos.

Un equipo técnico, encabezado por la Arquitecta Mabel Regidor Jiménez, ha elaborado el anteproyecto de la Casa Hermandad de la Hiniesta. En el estudio arqueológico realizado se consideran los arqueólogos que la musealización de los restos “entroncaría directamente con el espíritu de la cautela arqueológica y de la Ley de Patrimonio en su fase final de divulgación y puesta al servido de la sociedad en general. Buscar las soluciones para hacer compatibles los restos de indudable valor hallados y la vocación de servicio público de la Hermandad y de su casa, es tarea de todos que redundará en el beneficio de todos.”

Para la restauración de los restos arqueológicos, el documento considera necesarias tres actuaciones; la restauración de la pintura mural almohade, la consolidación del asiento de la alberca almohade y la restauración de las canalizaciones. Para la puesta en valor de los hallazgos arqueológicos se propone redefinir el entorno espacial del mismo, posibilitando la visita, así como su mantenimiento y conservación.